Adiós 2012

Cuando llegan estas fechas, quien más y quien menos echa la vista atrás para reflexionar sobre todo lo que nos ha pasado durante este año que acaba. Y lo que nos encontramos es que ha sido un año duro, un año plagado de sobresaltos, de muy pocas buenas noticias y de un sinfín de recortes y pérdidas de derechos. El Gobierno de Rajoy ha suspendido en todo: Han sido malos gestores y no han generado confianza, como decían que ocurriría. Han hecho todo lo contrario de lo que prometieron, sin explicarlo, o haciéndolo a través de eufemismos, a golpe de Decreto – casi una treintena en este año- más que ningún otro gobierno anterior.

2012 comenzó marcado por las primeras e injustas medidas que ponía en marcha Rajoy pero también por las elecciones autonómicas en las que los andaluces y andaluzas decidieron que Andalucía afrontaría la salida de la crisis desde la izquierda, con un modelo diametralmente opuesto al que está ejecutando el Partido Popular. 

Y eso lo demostró el Gobierno andaluz nada más echar a andar, aprobando un plan de medidas de choque que se dotó con una partida económica de 200 millones para generar 11.100 empleos en obras educativas, medioambientales y de vivienda.  Esta fue la respuesta de Andalucía a “la falta de respuesta” del Gobierno del PP que ha ido rechazando todas y cada una de las peticiones que le hemos realizado para que arbitren un plan de empleo. 

Ante el drama del paro, el Gobierno de Rajoy actúa dándole la espalda al mayor problema al que nos enfrentamos. Y así lo ha demostrado también en los Presupuestos Generales del Estado, los aprobados en abril para 2012 y los que ha elaborado para el próximo año. 

En las cuentas de 2013, además, la provincia de Almería sale muy mal parada ya que no hay partidas para obra nueva en la Alta Velocidad ni tampoco para infraestructuras tan necesarias como el soterramiento o el desagüe de  la Balsa del Sapo, por citar algunas. Y todo esto en un marco de recortes en Sanidad, Servicios Sociales, Educación y Justicia que también afectan a todos los almerienses.

2012 también nos deja otros asuntos que merece la pena comentar por el interés que suscitaron en Almería. 

En julio, pusimos en el mapa nacional el Palacio de Congresos de El Toyo con la celebración del 12 Congreso Regional del PSOE de Andalucía, indicándole, de paso al Ayuntamiento de Almería, el camino a seguir para rentabilizar esta infraestructura que tenía abandonada. En ese Congreso, los socialistas andaluces elegimos a José Antonio Griñán como secretario general y pusimos las bases del camino que habríamos de seguir para articular una salida progresista a la crisis y profundizar en un nuevo modelo económico, sostenible y centrado en las personas. 

Este año que acaba también hemos sufrido los socialistas  pérdidas irreparables, como la de Joaquín Pérez Siquier, un hombre fiel a sus convicciones y de espíritu inquebrantable en la búsqueda de una sociedad más justa e igualitaria. La renovada Aula de Cultura Socialista, que echó a andar este mismo mes, lleva su nombre y será nuestra guía para ahondar en los valores que siempre representó. 

Ha sido, sin duda, un mal año en el balance general pero me resisto a que los almerienses terminemos cayendo en la desesperanza. Somos una gran tierra, con grandes emprendedores, que ha conseguido a base de esfuerzo ser puntera en la agricultura, la piedra natural, las energías renovables o el turismo. Lo que nos ha hecho fuertes hasta ahora es, sin duda, nuestra fuerza para el futuro. Feliz 2013.