Movidas en Radio Televisión Española

Movidas en Radio Televisión Española

Kayros
01:00 • 21 jun. 2013

No todo era desechable  en  la radiotelevisión pública de  cuando gobernaba José Luis Rodríguez Zapatero.  Analizando ahora su  doble mandato vemos  que los medios públicos  se distinguieron primordialmente por dos cosas:  una, los contratos  de gente profesional y experta  alejada  de los  favores  del partido, y dos, la libertad de expresión  estuvo al alcalce de cualquiera que tuviese algo que decir, otra cosa no hubieran permitido los directores  del programa.  


Mira que a los socialistas les dijeron cosas horrendas  en el transcurso de la  campaña electoral que ascendió a Mariano Rajoy, lo que jamás pudieron afearle fue su política  de medios de comunicación en la  que brillaron excelentes  nombres profesionales de la Televisión y de la Radio. 


No voy a hacer un canto al periodista Juan Ramón Lucas y compañía, entre otras razones porque puedo quedarme corto. Indudablemente era gente conocida que mantenía   razonables  niveles de audiencia en la televisión pública. En cambio, entró el Partido Popular como buey en la cacharrería y comenzó a destituir  a los profesionales existentes  en las plantillas poniendo en los puestos de responsabilidad a los suyos, y cuando digo suyos me refiero a los  directamente relacionados con el ejecutivo.  Ahora ¿no tienen ustedes  dificultad cuando aparece algún periodista que no conocen? ¿Saben quién les  habla?  ¿Qué credibilidad les merece un señor  salido del anonimato y cuyo curriculum  solo llama la atención  mirándole desde la calle Génova?  




No me extraña que  estén cayendo las audiencias y que se sucedan con frecuencia las  destituciones. Gran tensión es el que hay entre el personal y fulminantes dimisiones son el caldo de cultivo entre políticos que no periodistas  especializados  sabiendo   de lo que  va.  


Un medio de comunicación público solo es tolerable  desde la  independencia y la calidad profesional de sus trabajadores. Si la audiencia y los telespectadores notan que el mensaje huele a ideología de la Fundación FAES o a oficina siniestra, mejor es apagar el medio por mucho que nos machaquen con la salida  de la crisis.






Temas relacionados

para ti

en destaque