¿Cuánto le ha costado a las arcas públicas la visita de una delegación del Partido Popular de Almería a la ministra de Fomento? Habría que echar algunas cuentas pero lo que está claro es que, por poco que sea, no ha valido para nada. La cumbre ‘popular’ solo ha servido para tirar el dinero de los contribuyentes, puesto que ni su presidente provincial, Gabriel Amat, ni el alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez, ni el resto de participantes en ese encuentro fueron capaces de sacarle ni un solo compromiso a Ana Pastor.
El ridículo que han protagonizado no tiene parangón en la reciente historia de nuestra provincia. Los almerienses suponíamos que esa reunión habría sido convenientemente preparada para anunciar, tras su conclusión, que el Gobierno iba a reanudar, pongamos por caso, las obras de la Alta Velocidad; que se iban a comenzar a dar pasos importantes con el soterramiento de las vías del tren; que el Puerto de Almería dejaría de ser la cenicienta de los puertos españoles al comenzar los trabajos para la conexión de los muelles con el ferrocarril o que el ministerio de Fomento iba a reconocer que ha cometido un gravísimo error con la ruta aérea Sevilla-Almería. En fin, lo que cualquiera podría haber pensado.
¿Qué pasó entonces? Poca cosa. Ni Hernando, ni Matarí, ni Amat, ni Javier Aureliano García, ni la delegada del Gobierno del PP en Andalucía, la también almeriense Carmen Crespo, consiguieron rascar absolutamente nada a la titular de Fomento, Ana Mato. Eso sí, les quedó una fotografía del acto muy correcta.
La realidad de Almería es hoy la misma que antes de la famosa cumbre que calentó el alcalde de Almería haciéndonos creer que el Ave podría llegar en 2019, fecha en la que se desarrolla Blade Runner, una película del mismo director que ha estado rodando Exodus en tierras almerienses. Igual pensó en eso el alcalde y recordó la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? que inspiró esa famosa película de ciencia ficción de Ridley Scott y terminó hilando una cosa con otra: las ovejas eléctricas y el Ave. Pasmoso ¿verdad? Pues igual de sorprendentes y absurdas son las explicaciones que hemos tenido que escuchar de los participantes del PP en la reunión de Fomento.
En estos dos años de gobierno de la derecha, lo que sí tenemos claro los almerienses es que con el PP no vamos a ningún sitio puesto que no se ha dado ni un solo paso para que nuestra provincia avance en materia de comunicaciones. Para el Gobierno de Rajoy, con la complicidad de los dirigentes provinciales del Partido Popular, Almería ha dejado de existir y la reunión del pasado lunes es su fiel constatación.
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