El ejemplo de Fernández Revuelta

Hace unos días, Almería rendía un más que merecido homenaje a José Fernández Revuelta, primer presidente democrático de la Diputación. El Teatro Apolo se quedó pequeño para acoger a los numerosísimos amigos, familiares y personalidades de todos los ámbitos que quisieron compartir con Fernández Revuelta esta cita, arropándole y acompañándole. 

La figura de este político y escritor, su labor durante los años que estuvo al frente de la institución provincial, han sido ejemplo a seguir. Se enfrentó a la dura tarea de dirigir una institución en la España de la Transición, con muy pocos medios y muchas incertidumbres y lo hizo a base de esfuerzo, trabajo y compromiso. Su labor, y la de todos los hombres y mujeres que durante la Transición lograron sacar adelante un país y una provincia olvidada, debe ser un ejemplo para las nuevas generaciones de políticos.

 Probablemente, tuvo que tomar decisiones impopulares, pero beneficiosas para el interés general  y no dudó en hacerlo, aunque ello supusiera un desgaste personal.  Nada tiene que ver el escenario actual con el de entonces, pero personas como Fernández Revuelta son un referente de cómo hay que actuar en tiempos convulsos. Entonces, como ahora, el sacrificio acabó teniendo sus frutos y poco a poco esta provincia fue viendo la luz, aunque no lo hubiera conseguido sin la madurez de una ciudadanía que entendió la necesidad de realizar un esfuerzo común.

Hoy, al igual que ayer, los datos ya avalan las reformas emprendidas y el enfermo comienza a dar signos de recuperación. Pero no podemos pasar de la UVI a planta de la noche a la mañana, por eso, como en la Transición, hace falta tiempo para adaptarse. España estaba en situación de quiebra y en dos años, entre todos, hemos recuperado la economía. Ahora, es necesario que la recuperación se refleje en los hogares, que las familias también sean partícipes porque con más dinero en los bolsillos será más fácil garantizar la sociedad del bienestar. Y en ello estamos.