Vivir cuesta dinero

Un  teórico  de la economía ( pienso que japonés, no me hagan mucho caso) dijo que para terminar con los problemas de la pobreza, las enfermedades y  las altas  pensiones, lo más  conveniente era  que se murieran los viejos. Hay gobiernos que, así como quien mira para otro lado, parecen sostener la misma brutalidad teórica.  Las propuestas del comité de “sabios”( Montoro dice que solo son propuestas) quieren imponer el IVA del 21% a un montón de cosas. 

Está bien que no comamos carne ni pescado, que no vayamos a la peluquería, que no toquemos el vino y mil obscenidades más, pero que nos encarezcan el agua de beber   me parece demasiado. El  agua se está poniendo muy cara en el planeta. Nuestra hermana  agua, a quien San Francisco piropeaba como pura, piadosa y casta, la están rodeando de todas las lujurias imaginables desde que los gobernantes saben que es un bien  escaso. A pesar de ello no verán que los alcaldes propietarios de pozos regalen al pueblo su gratuita mercancía. Es más, poco a poco tratarán de hacer comercio con el aire que respiramos.  Quienes vivimos en la costa almeriense, y  nuestro dinero nos cuesta, no nos explicamos cómo podemos todavía mirar al mar sin pagar ningún tributo. Y lo mismo subir a los acantilados sin que nos detenga un  alguacil por meternos sin permiso en una finca privada. No me dirán que a ciertas capas económicamente débiles  no se le está haciendo el vivir cuesta arriba. 

El asunto de los edificios ilegales a orilla de la playa hoy es ya un peligro inminente según vemos lo que está ocurriendo por el cambio climático. Pues bien,  este gobierno no ha pensado otra cosa que alargar cuarenta años la irregularidad. Siga la costumbre tumbe al que tumbe.  En fin, menos mal que han encontrado la prueba del estallido cósmico del Big  Bang. Opinan los estudiosos que esta noticia cambiará la astronomía, la cosmología y la física. Sí, sí, pero no por eso vaya a cambiar el PP. Seguirá  haciéndonos pagar las crisis cíclicas  de su intocable   sistema capitalista. Seguirá el Montoro de turno recordándonos  que cada españolito debe al estado 20.000 euros porque la de duda  alcanza ya el 95% del PIB. No tienen hartura.