En marcha un nuevo Barrio Alto

La principal diferencia entre la palabrería y la eficacia son las acciones. En el Ayuntamiento de Almería hay partidos y portavoces que son capaces de pasarse años hablando sobre “el modelo de ciudad”, dando vueltas y más vueltas sobre elevados conceptos teóricos, pero sin pasar de esa fase. Y no lo digo porque hacer obras desde la oposición sea bastante complicado, sino porque durante el tiempo en que han estado en el gobierno municipal también se pasaban el tiempo dándole al torno de las ideas y las frases. Las obras llegaban tarde, mal o acaso nunca. Por ejemplo en el Barrio Alto los almerienses hemos pasado muchos años, demasiados, escuchando debates ideas y demasiados “debemos hacer” en relación a esta zona de la ciudad. Pues bien,  ha tenido que ser el equipo de Gobierno del PP el que, finalmente, haya comenzado a cambiar una realidad que a nadie gustaba y que nadie era capaz de resolver. Y es que para cambiar a mejor una ciudad no basta con refugiarse en el discurso de las ideas o en la narrativa ideológica: hay que tener la solvencia técnica y la capacidad económica para planificar, licitar y ordenar que las máquinas comiencen a trabajar. Nosotros nos comprometimos a mejorar el Barrio Alto y ya lo estamos haciendo. Las obras son hoy una realidad que responden a dos años largos de trabajo administrativo y de planeamiento con el objetivo de resolver una demanda histórica de los vecinos. A su vez, a través de la obra pública, seguimos contribuyendo a la dinamización económica y la creación de empleo. Las obras que acaban de ponerse en marcha en el Barrio Alto y que durarán cerca de ocho meses mejoran la trama urbana de la capital y transforman de manera radical la situación que hasta hoy ha presentado la zona. Los trabajos, a nivel de urbanización y de la dotación de toda la infraestructura necesaria, se llevarán a cabo sobre una superficie total de 4.807 m2 y tienen un presupuesto de unos 600.000 euros. Como paso previo las obras se han iniciado con las demoliciones tanto de los inmuebles ya desocupados como de las edificaciones en mal estado o abandonadas, así como de los espacios públicos residuales que se encuentran en la zona. Respecto a la trama actual, solo se mantienen dos viviendas, compatibles con el planeamiento aprobado. Esta es una de las actuaciones más importantes de las cuatro previstas para la zona, y viene a sumarse a la primera de las iniciativas ya culminada. En definitiva una serie de actuaciones que supondrán un nuevo Barrio Alto, con todos los servicios necesarios y dimensionados a la realidad actual: abastecimiento, saneamiento, alumbrado público, telefonía, tráfico, una nueva red viaria y espacios libres de calidad. Como digo, las palabras son hermosas, pero son las obras las que hacen ciudad.