Conforme pasan los días, estamos mas cansados los españoles de tanta corrupción y aprovechamiento de unos y otros, es como si una maldición hubiese caído sobre España y parece que esto no tiene solución, ya que no paran de salir aprovechamientos indebidos de los que no se salvan ni partidos políticos ni sindicatos ni personas que creíamos decentes y generosas.
Es triste oír los Telediarios o las Emisoras de Radio, mas que noticias, como dice mi hermana es la “Tragedia Nacional” lo que nos muestran cada día. Andaba yo pensando esta tarde cual sería la solución a tanta tragedia cuando vi muy claro que esta se encuentra en las Tablas de la Ley, y es que en ellas y solo en ellas está la solución a tanto descalabro económico y moral.
Personas muy queridas por mí, sensatas y normales no se atreven a preguntar como viven sus hijos y sobre todo sus nietos. Y es algo que les preocupa bastante porque junto al desastre económico convive un desastre moral que ni lo han visto en sus padres y abuelos. Ese vivir en pareja, como dicen ellos, con toda naturalidad, a nuestra generación no solo no nos gusta sino que nos preocupa grandemente. Por ello tras pensar mucho en donde puede estar la solución y tras meditarlo, creo que esta se encuentra con facilidad en Las tablas de la Ley de Dios, porque creo que no somos mas felices si Dios no existe en nuestras vidas.
Y es que en un mundo sin Dios no puede encontrarse la felicidad que el hombre ansia. Benedicto XVI ya nos lo dijo “ Los derechos humanos están fundados en Dios creador, el cual nos dio a cada uno la inteligencia y la libertad y si prescindimos de esta base ética, nos quedaríamos sin comprender que el ser humano está hecho a Imagen y semejanza de Dios algo que está inscrito por Dios en la conciencia del hombre Y de todo esto deriva la dignidad de la persona humana, el derecho a la vida, la concepción de la familia como célula primera de la sociedad y el derecho a la educación y libertad religiosa, entre lo mas importante. Por ello para los cristianos un mundo sin Dios sería un mundo en tinieblas. Los cristianos hemos de serlo no solo sociológica sino también teológicamente No lo olvidemos, volvamos a estudiar el Ripalda, allí lo aprendimos de chiquitillos y sigue siento igual, amemos a “Dios sobre todas las coas y al prójimo como a nosotros mismos”. Así lo dicen las tablas de la Ley de Dios.
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