La fe radical

Juan Fernández Gómez
23:57 • 19 ene. 2015

Es evidente que la religión es una ideología. Entendiendo por ideología un cuerpo doctrinal o un conjunto de ideas profesado. Las ideologías también son conceptos llevados a cabo por grupos determinados, que se rigen por referentes de identidad.


Así pues, nos enfrentamos ante dos conceptos filosóficos de ideologías:


Uno que transciende todo un sentido universal dentro de un concepto amplio que abarca lo político, económico y social, como realidad conocida o inducida por la rebelación. En otro aspecto estricto,  que tan sólo califica concepciones del mundo para interpretarlo y fabricarlo según intuiciones a tenor del individuo; y que está basado en pura y simplemente construcciones mentales basadas en las técnicas más rigorosas de todo orden.




Por el contrario, las creencias son conceptos que organizan la percepción de parte del mundo, en el que una sociedad de referencia puede ser mítica o racionalizada sin que para ello sea verdadera. Es por lo que tengo que manifestar mi sorpresa de vivir inmerso en un caldo de cultivo bajo pancartas que  anuncian un “progreso” asesorado por ciencias científico-técnicas que han dado lugar a un mundo globalizado y demagógico donde impera la sin razón de una sociedad apoyada en democracias de papel, con una ideología transcendental que reclama. Las actuación filosófica de las Humanidades, que no han sabido dar respuesta a la problemática que nos vigila y que en ello nos va la vida.


     Me pregunto si el proyecto Postmoderno está agotado, si hemos agotado las vías de un mundo civilizado, si hemos retrocedido a una modernidad frustrada.




Convendrán conmigo que hay muchos tipos de terrorismo basados en políticas de estado, pero también estarán de acuerdo que el terrorismo más cruel es aquel que no podemos ver, que basados en credos y filosofias transcendentales asesinan y coartan las libertades sociales. Movimientos Salafistas basados en la verdadera fe de los  “piadosos predecesores”  que atentan contra un occidente propagador del laicismo; que no les tiembla la mano a la hora de interpretar los Hadices del Coran hacia la guerra santa (yihadismo). Estoy convencido que todo credo tiene que evolucionar como ha evolucionado la religión Católica y de igual modo la interpretación por los ulemas de Charia.


Al gran conquistador de Egipto, año 634;  Amr ibn al As le preguntaron  que por qué no regresaba, respondio:  ¡Dadme las tierras y los ríos!, en definitiva estaba hablando de botín, como cualquier ser humano. Ante la duda existe el respeto y respetar es aceptar al prójimo; de lo contrario estaremos a merced de San Juan de Cruz en aquello de que: “La duda es la noche oscura del alma”.





Temas relacionados

para ti

en destaque