Dos tazas de caldo de AVE

Se ha acusado con frecuencia (y en muchos casos con razón) al Partido Popular de tener pocos reflejos y no tener olfato para convertir la debilidad ajena en éxito propio. Bueno, pues algunas veces las cosas no son como parecen o se dicen en las tertulias más pluscuamperfectas. Tras la ocurrencia de Ciudadanos de anunciar el cerrojazo al AVE gracias a las aportaciones de un economista estrella reclutado para conseguir el mismo efecto que esos cocineros mediáticos que joden una tortilla de patatas metiéndola en una copa, el PP ha salido al paso y ha anunciado (después de provocar una estampida de alcaldes y alcaldesas bramando contra la idea) que en lo que queda de año lanzará nuevas obras de ferrocarril, fundamentalmente de AVE, por un importe total de 2.400 millones de euros. Y además, para que no quepan dudas, la ministra de Fomento, Ana Pastor, ha reiterado que la Alta Velocidad tiene "retorno social, medioambiental y también económico". Y si en alguna zona de España se mira al AVE con preocupación y angustia es en Almería, porque los diferentes retrasos de los diferentes gobiernos y el progresivo empeoramiento de nuestras comunicaciones ferroviarias con el resto de España hacen del AVE un valor estratégico irrenunciable porque, sencillamente, no tenemos otra alternativa. Salvo, eso sí, que consideremos la vuelta a la diligencia y las casas de postas, (enorme Calixto Sánchez la otra noche en el Museo de la Guitarra, cantando “Diligencia de Carmona” en el Circuito Municipal de Divulgación del Flamenco) cosa que tiene más pasado lírico que futuro infraestructural. Ahora, que también cabe la posibilidad de creer a los portavoces almerienses de Ciudadanos, que aseguran que el AVE se paralizaría en el resto de España salvo en Almería, porque ellos lo valen. En fin, creo que ya hemos visto esa película, pero protagonizada por el PSOE, cuando se discutía el proyecto del trasvase. Así que por una vez en el PP han estado rápidos. ¿No quieres caldo? Pues tomas dos tazas.