La guerra a los plásticos de la UE asusta a los agricultores almerienses

El anuncio realizado por la vicepresidenta de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo, Clara Aguilera, en torno a las negociaciones de la nueva Política Agrícola Común, y más en concreto al papel de los plásticos en la agricultura, ha sembrado de dudas al campo almeriense.

La eurodiputada, que está participando activamente en los debates, advirtió que para los europeos “no es admisible tener en el Mediterráneo más plásticos que peces”, y anunció el fin del “usar y tirar” en lo que se refiere a los plásticos utilizados en la agricultura.

Residuo cero
Las empresas gestoras de plásticos, tanto para las ventas como para el tratamiento de los residuos, han venido a poner un poco de calma en un sector que, en el caso de Almería, es el de mayor potencial en un modelo intensivo de  producción de frutas y hortalizas bajo abrigo. 

Isabel Goyena, directora de Cicloplast, sociedad que reúne a varias de las empresas de plásticos, tranquiliza a los productores de la provincia, que en las dos últimas semanas les han hecho llegar sus temores y sus dudas sobre este asunto, afirmando que en cualquier caso “no se va a prohibir el uso de los plásticos en la agricultura, aunque la línea de trabajo en la Comisión y en el Parlamento Europeo si entrarán en una regulación mucho más estricta del tratamiento de sus residuos”.

Cambio pendiente
Lo que probablemente si provocará la nueva normativa que ya se debate en el Parlamento Europeo es un cambio en los sistemas de gestión, o más bien un impulso en la adopción de medidas que deberían haberse articulado hace ya bastantes años, cuando se pusieron sobre la mesa los constantes problemas que genera la acumulación de residuos plásticos en el entorno rural.

Goyena explica que en unos pocos años “tendremos que ir hacia una gestión integral que abarca desde una mayor implantación de plásticos biodegradables a sistemas más eficientes de recogida, gestión, tratamiento y reutilización de esos residuos, muchos de los cuales aún se encuentran tirados”.

Punto y aparte
Clara Aguilera avanzó en la última edición de la Expo Levante, en Níjar, que los debates en el Parlamento Europeo se están posicionando en torno al modelo de la economía circular: “los viejos sistemas de la economía vertical, aquello de usar y tirar, ya no son aceptables y, para seguir en los mercados, hay que apostar por la economía circular basada en la sostenibilidad de los sistemas productivos donde se ha de cuidar no sólo en impacto de la producción, sino también de la gestión de los residuos para poder obtener de ellos un valor añadido”.

En esa línea, sostiene que Almería debe afrontar cuanto antes el reto de diseñar una política de residuos que evite que su modelo entre en colisión con la política agraria comunitaria. Si así lo hace, tendrá opción a recibir ayudas para afrontar el cambio.