Cuáles son las diferencias entre los invernaderos de China y Almería

Gracias a los datos recientes proporcionados por la web Plataforma Tierra, perteneciente a Cajamar, y por la web Redacción AenVerde, se puede comparar la forma de cultivar bajo invernadero en Almería, España y en Weifang, China. Según un nuevo análisis de datos extraídos de las imágenes de satélites, los invernaderos cubren ahora más de 13.000 kilómetros cuadrados de tierra en todo el mundo. Hace cuatro décadas, cubrían solo 300 kilómetros cuadrados.  

El grupo de invernaderos más grande del mundo se encuentra en China, y se extiende a lo largo de más de 820 kilómetros cuadrados en la llanura de Weifang, una ciudad ubicada en la provincia de Shandong, en el noreste de China. En Almería se han alcanzado las 33.634 hectáreas de invernaderos, pese a ser una región mucho más pequeña y con unas condiciones climatológicas difíciles. 

En esta parte de China, las frutas y verduras se cultivan generalmente en invernaderos. “Los pepinos, las berenjenas y los tomates proporcionan verduras fuera de temporada a todo el país”, dijo Xiaoye Tong, investigadora postdoctoral de la Universidad de Copenhague. “Cada vez más, los agricultores de Weifang también plantan frutas de alto valor, como fresas, uvas, kiwis y pitayas”.

En Almería, hay que destacar la apuesta del sector por una producción sostenible, tal y como muestra la evolución creciente del uso de técnicas de control biológico para el control de plagas en la provincia almeriense. Así, las primeras estimaciones facilitadas por la Delegación Provincial en Almería de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía, muestra un aumento del 1,65 % de la superficie cultivada con estas técnicas en 2023/24 en comparación con la anterior hasta alcanzar un total de 28.322 hectáreas.

En el avance previsto por este organismo para las diferentes hortalizas destaca melón, sandía y pepino, lo que representa un dato positivo, ya que se trata de cultivos con un ciclo productivo más corto en el que la adopción de estas técnicas está siendo más lenta. Por el contrario, en tomate se prevé que disminuya la superficie de control biológico en un -4,4 %, representando el 50 % del total cultivado de esta hortaliza. 

A nivel de ambas regiones, los agricultores utilizan invernaderos porque son una forma eficaz y relativamente económica de aumentar los rendimientos. Pueden utilizarse para ampliar la temporada de cultivo y ejercer control sobre las condiciones de temperatura e iluminación. Como consecuencia, queda expuesto un mar de plástico sobre las ciudades que tinta de diferentes colores los dos territorios.