Un equipo de investigadores del Departamento de Agronomía de la Universidad de Córdoba (UCO) ha propuesto un innovador método para medir el impacto de diferentes cultivos en la erosión del suelo agrícola. El objetivo de esta iniciativa es sensibilizar a la sociedad sobre la gravedad de este problema y fomentar prácticas agrícolas que protejan uno de los recursos más vitales para la humanidad: el suelo.
En un contexto global en el que la agricultura debe alimentar a una población creciente, el uso sostenible de los recursos naturales se ha vuelto esencial. Conceptos como la "huella de carbono" o la "huella hídrica" han calado en la sociedad al mostrar el costo ambiental de la producción de alimentos. Ahora, los investigadores de la UCO han definido y aplicado a España el concepto de "huella del suelo", que permite evaluar la cantidad de tierra perdida en relación con la productividad de los cultivos.
La ‘huella del suelo’: una herramienta para medir la sostenibilidad agrícola
La “huella del suelo” se calcula dividiendo la tasa de erosión del suelo entre la productividad de un cultivo. Este indicador es clave para entender el impacto ambiental de la agricultura y se ha integrado en la estrategia europea “Un pacto del suelo para Europa”.
El estudio no solo permite medir el impacto, sino también establecer comparaciones entre cultivos y zonas del país, lo que ofrece un panorama más claro para la toma de decisiones en políticas agrarias y de sostenibilidad. Además, pretende simplificar el lenguaje técnico para involucrar a consumidores, agricultores y autoridades en la búsqueda de soluciones para proteger el suelo.
El olivar: un motor económico con una gran ‘huella del suelo’
Uno de los hallazgos más significativos del estudio es que el olivar, uno de los cultivos más emblemáticos y económicos de España, presenta la mayor “huella del suelo” en comparación con otros cultivos. Esto significa que su cultivo genera una elevada erosión en relación a la cantidad de alimento que produce. Sin embargo, los investigadores puntualizan que factores como la topografía y el manejo agrícola también juegan un papel crucial en la erosión del suelo.
Por el contrario, cultivos como la cebolla, la patata y la naranja tienen una “huella del suelo” mucho menor, ya que generan una erosión reducida en proporción a su productividad.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/agricultura2000/noticia/8/agricultura/280713/metodo-para-medir-el-impacto-de-los-cultivos-en-la-perdida-de-suelo-agricola