Un almeriense entre los 50 estudiantes más brillantes de España

Todos podemos entender a cualquier estudiante que diga: “Se me dan muy mal las matemáticas”. Otra cosa es que lo diga, como hace, Juan Manuel García Lea, alumno almeriense de segundo de bachillerato del colegio Altaduna-Saladares y uno de los 50 jóvenes más brillantes de España y seleccionado por ello para participar en el programa Becas Europa.

Como ha informado su centro, los candidatos finalistas a este programa han tenido que disputar su plaza entre más de 4.000 estudiantes; todos ellos con una nota media de 9,8 o superior en bachillerato. 

‘Juanma’, como le conocen familiares y amigos, se muestra orgulloso de haber conseguido formar parte de este selecto grupo, aunque no presuma de ello, como demuestra admitiendo su dificultad para las ‘mates’, a pesar también de su nota media hasta primero de Bachillerato ha sido de 10, y que en segundo va por el mismo camino. “A veces soy muy descuidado y en matemáticas las precisión es fundamental. Es cierto que me resulta más tediosa esta asignatura que la filosofía o la historia, por ejemplo, a pesar de que puede parecer contradictorio con mi idea de estudiar Medicina”, reconoce. De ahí a que su trabajo para lograr también un 10 de media en matemáticas sea para él “un sacrificio necesario para llegar a la meta” que quiere conseguir, que no es otra que convertirse en neurólogo, por ejemplo. 

Medicina

Para ello primero tendrá que hacer el grado de Medicina, para el que tiene dos opciones preferentes: Granada, como hicieron tanto su padre como su madre; y por otra en la Universidad de Navarra, aunque en este caso tendría que aprobar un examen de acceso. En cualquier caso, tiene claro que “si consigue la nota de corte” (sic) seguirá los pasos de sus progenitores con una profesión de la que destaca su faceta de ayuda a la sociedad.

Juanma también tiene claro que quiere salir de Almería y estudiar o trabajar en el extranjero, al menos durante una etapa de su vida. Y gracias a la Beca Europa tendrá la oportunidad de visitar algunos de los centros que quizás, por qué no, podrían formar parte de su futuro profesional, puesto que los 50 estudiantes seleccionados recorrerán durante 20 días las universidades más emblemáticas del continente europeo: Alcalá de Henares, Salamanca, Cambridge, Londres, Heidelberg y Santiago de Compostela, del 2 al 19 de julio de 2023. Entre ellas, admite sentirse más atraído por “Cambridge, sin duda”.

En estas visitas tendrán la oportunidad de asistir a encuentros con profesionales líderes en su campo, asistirán a conferencias y realizarán actividades lúdicas y formativas con autoridades del ámbito político, académico y de investigación. Entre ellos, destaca la recepción con los Reyes de España.

El objetivo de Becas Europa es premiar la excelencia de los futuros universitarios y crear una red de estudiantes líderes en Europa. Además, se busca fomentar el conocimiento y el respeto hacia la Unión Europea, así como tener la oportunidad de integrarse en el mundo universitario desde muy temprano para desarrollar su talento. Juanma ha decidido ya aceptar la oferta, también incluida al ser beneficiario de la beca, para formar parte de la Escuela de Liderazgo Universitario (ELU), que es otra iniciativa del Banco Santander y la UFV. 

Liderazgo

Se trata de un programa formativo, de cuatro años de duración, que se realiza en paralelo al grado que cada alumno decida cursar. Se intenta formar en liderazgo y potenciar cada uno de sus talentos y capacidades para después retornarlo a la sociedad.

‘Juanma’ ha uno de los 12 estudiantes andaluces seleccionados, junto a 10 de Madrid, cinco de la Comunidad Valenciana, cuatro de Aragón, tres de Castilla y León, tres de Cataluña, tres de Cantabria, dos de Extremadura, dos de Galicia, dos de las Islas Canarias, uno de Murcia, uno de Navarra, uno del País Vasco y uno de Castilla La Mancha. 

A sus 18 años, Juanma García dice que detrás de su media de 10 no hay ningún milagro, sino “mucho trabajo”. “Para estudiar es fundamental sobre todo la organización y conseguir un hábito”, explica. En un día normal suele dedicar al estudio, tras el tiempo en el colegio, unas tres horas, aunque en época de exámenes puede llegar a las ocho horas.

Por lo demás, se define como un joven normal, al que le gusta el deporte (practica el pádel y el tenis, pero eso sí, nada de deportes acuáticos), la música (toca el saxofón y el piano), la fotografía, el diseño gráfico y la lectura (si es para desconectar se decanta por la novela, y si es para aprender por obras filosóficas, como La República, de Platón, o El Método, de Descartes. Casi nada.