Una tormenta de arena del Sáhara cubre Almería de polvo rojizo

La provincia de Almería, como otros muchos puntos del litoral mediterráneo español y otras zonas del interior peninsular, amaneció ayer ‘sucia’, cubierta por una fina capa de polvo de color amarillo rojizo. Era el polvo africano traído desde el norte del continente por los vientos del sur.

El origen del fenómeno es una gran tormenta de arena en el corazón del desierto del Sáhara. Levantado por los fuertes vientos reinantes, el polvo rojo se desplazó durante la jornada del domingo hacia España y hacia países próximos al Sáhara como Marruecos o Argelia.

Eduardo Romay, climatólogo almeriense integrado en un grupo de estudiosos de la meteorología, explica que este fenómeno no es habitual en los meses de invierno, aunque si se ha repetido con cierta frecuencia en los últimos años durante los meses de mayor calor.

Altas temperaturas
Uno de los efectos observados desde la tarde del pasado domingo es una brusca elevación de las temperaturas, un cambio radical, cifrado entre seis y ocho grados más sobre los valores de la semana pasada, que tiene una doble explicación: por una parte es consecuencia de la entrada de vientos del sur que traen consigo no solo el polvo del desierto, sino también temperaturas elevadas del continente africano.

La segunda causa es el propio polvo en suspensión, la ‘calima’, que genera nubes secas que generan una especie de ‘efecto invernadero’ al no permitir la subida del calor que el sol acumula en la tierra durante el día, motivando un aumento de temperatura.

Suciedad
La llegada de las nubes de polvo seco han dejado suciedad en las calles, coches cubiertos de tierra e irritación a quienes tenían la ropa limpia colgada para secar. Pero podría haber sido peor si se hubiesen presentado lluvias de poca intensidad porque, en ese caso, habría llovido directamente barro.

Los ayuntamientos de la provincia se aprestan a limpiar las calles y los espacios públicos aunque muchos, como es el caso del de Almería, han mirado las previsiones y han decidido actuar sólo en algunos puntos ya que es previsible que durante la jornada del martes el fenómeno de la calima siga presente.

Ayer ya se baldearon algunas calles céntricas, como la rambla, y localidades como Adra o El Ejido iniciaron un plan especial de baldeo para adecentar unas calles que presentaban un aspecto de suciedad. El inicio de los baldeos se realiza por si aparecieran precipitaciones débiles en la jornada de hoy (poco probable), lo que convertiría la capa de polvo rojizo en un auténtico barrizal.