Puertos del Estado apuesta por llevar el ferrocarril soterrado al puerto

“Almería se merece abrir en las mejores condiciones su frente al mar”. Con esta frase clausuraba el curso de verano sobre el proyecto puerto-ciudad el presidente de Puertos del Estado, José Llorca, quien dejaba claro en la sala del Varadero del puerto de la capital que la apuesta del Gobierno es decidida para permitir esta integración de la ciudad con el uso comercial y de ocio de los terrenos en desuso del puerto.

Un proyecto que, tal y como ya se había avanzado por parte de la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento de Almería, tiene que contemplar la posibilidad de la llegada del ferrocarril al puerto y así se recoge en el convenio que se tiene que firmar entre ambos.

Afirmaba el presidente de Puertos del Estado que “para una buena relación puerto-ciudad es necesaria una separación de los circuitos de movilidad” y teniendo en cuenta que “la conectividad es fundamental para los puertos, la ordenación urbanística que haga el Ayuntamiento debe tener en  cuenta la conexión ferroviaria”. Eso sí, afirma que “no debe representar ninguna barrera para que sea una integración real, por lo tanto se deberá plantear no en superficie sino soterrado”.

Apuesta
Dejaba claro el alcalde de la capital, Ramón Fernández-Pacheco, que “parece poco compatible con la llegada del tren en superficie, por tanto el plan especial de integración así como el convenio contemplará la conexión ferroportuaria pero siempre soterrada”.

Teniendo en cuenta esta premisa, lo cierto es que la ponencia realizada por parte de José Llorca realizó un recorrido por algunos de los ejemplos de integración entre puerto y ciudad que se han realizado a lo largo de los años en España y analizado su paralelismo o no con Almería, su rentabilidad económica, e insistió en la necesidad de que cada fase del proyecto sea rentable para que pueda ser una realidad.

Explicó a grandes rasgos la hoja de ruta que debe seguirse a partir de ahora. Lo primero establecer la Delimitación de Espacios y Usos Portuarios, algo que asimiló a un “deslinde” en el que se marca la parte de puerto comercial, pesquero, puerto-ciudad, y así todos los usos previstos. A partir de ahí, toca realizar el plan especial para la parte correspondiente al puerto-ciudad que debe ser aprobado por el Ayuntamiento.

Intervención
Una vez realizado, recordó Llorca que la inversión para costear estas obras no puede llegar desde la Autoridad Portuaria, salvo para temas culturales, sino que tiene que ser con la inversión privada a través de concesiones administrativas que pueden alcanzar un máximo de 50 años y que, por ser en zona de integración podría contar con un permiso especial para realizar un hotel.

Esas concesiones tienen que ser rentables para el puerto, de hecho se realizarían ingresos a través de las tasas de ocupación y de actividad, además de algunos porcentajes por el volumen de negocio que generen.
Y es que, deja claro el presidente de Puertos del Estado que ellos creen “en la colaboración público-privada”.

Conclusiones
Lo cierto es que la intervención de José Llorca hizo las veces de cierre a un curso en el que se ha analizado la situación actual del proyecto en Almería, varios ejemplos como el de Málaga o Barcelona, y sobre todo, ha servido para animar a la sociedad almeriense a hablar nuevamente de esta obra.

Explica la presidenta de la Autoridad Portuaria, Trinidad Cabeo, que “el balance de este curso de verano es que ha sido interesante, fructífero, y que nos ha hecho reflexionar mucho sobre el futuro de un gran proyecto para almería, que cambiará la relación entre el mar y la ciudad”.
A partir de ahora lo que toca es terminar de cerrar el convenio para que se firme, si se cumplen los plazos previstos, en los primeros días del próximo mes de septiembre.