Más de 600 incidencias en las playas desde junio

Más de 600 incidencias, la gran mayoría leves, son las que llevan registradas los socorristas de la empresa Cooperación 2005 desde que iniciaran su labor a finales de junio hasta ayer lunes. Con una plantilla de 41 personas, 30 en servicio los siete días de la semana en horario de 12 a 20 horas, la entidad adjudicataria del servicio de vigilancia de playas reconoce que la mayoría de las actuaciones tienen que ver con picaduras de medusa, púas de erizos o mordeduras de pez araña.
 Integrados en el Plan de Emergencias ideado para la época estival, los socorristas, formados en primeros auxilios y rescate, están coordinados con el 061, pero también con Policía Local y Policía Nacional. Y es que, tal y como señala el coordinador de la empresa, Óscar París, “somos los primeros en observar y llegar al punto en el que ocurre algo”.

Repartidos en siete bases, ubicadas en las playas de El Palmeral, San Miguel, Nueva Almería, Costacabana, El Toyo, Retamar y Cabo de Gata, los socorristas realizan labores de vigilancia estática en las torres y también dinámica. En paseos por las playas, están atentos a cualquier incidencia y resuelven todas las dudas y consultas que les hacen tanto turistas como vecinos de Almería. 

Atienden, por tanto, cualquier incidencia y, sobre todo, recomiendan el baño más seguro. Están también pendientes de que las playas están “limpias y a punto”, de modo que si observan cualquier problema con el mobiliario o la limpieza se encargan de comunicarlo para que todo esté perfecto.

Estos días participan, además en las campañas que realiza el área de Fomento y Playas, con el reparto de ceniceros o fundas protectoras para el móvil.Este área, de la que se encarga el concejal Carlos Sánchez, ha ampliado este verano el número de socorristas y también los días en los que darán servicio.

Información
Entre las labores de los socorristas está la de explicar cuáles son las normas en las playas de la capital y hacerlas cumplir. El desconocimiento de los vientos y las banderas que alertan de cualquier incidencia es todavía elevado entre algunos bañistas. Muchos, “y no siempre son turistas”, desconocen que con el viento de levante, resulta peligroso adentrarse en el agua con colchonetas que serán arrastradas hacia adentro.
En estos casos, la bandera amarilla indica problemas con el viento. Además, muchos residentes en Almería, acostumbrados a pasear con sus perros por la playa cualquier otro día del año, no saben que en verano no se puede hacer, dice.

 El pescador, el submarinista que usa arpón o el nadador imprudente son otros de los usuarios de las playas y zonas de baño “vigilados” por los socorristas. “Algunos desconocen la normativa y hay que explicarles qué se puede y qué no se puede hacer”, indica París, que insiste en que la labor de los socorristas es hacer de la playa un lugar de disfrute en el que el número de incidencias sea el mínimo.