Los 90.000 fieles de la comunidad islámica de Almería comienzan el Ramadán

Almería guarda en su interior un tesoro milenario, levantado con las piedras de las Canteras Califales y protegido por los muros de la Alcazaba. Vestigios de una historia enriquecida por el paso de los tiempos, las civilizaciones, las culturas.
Y aunque poco queda en el paisaje de aquella ciudad mora, todavía vibra en el aire el recuerdo de los tonos de las llamadas al rezo. Porque en pleno siglo XXI, una parte de Almería sigue siendo islámica.

Desde este sábado una comunidad de más de 90.000 musulmanes repartidos por los municipios de la provincia rinde tributo a sus tradiciones e inicia el Ramadán. El mes honra la revelación del Corán al profeta Mahoma y, más allá del conocido ayuno, se presenta como un ejercicio de espiritualidad, purificación y solidaridad con los desfavorecidos.

La celebración no es, ni mucho menos, irrelevante para la provincia de Almería. Un 13 por ciento de sus habitantes son musulmanes, un porcentaje muy superior a las cifras nacional (un 4 por ciento) y autonómica (un 3,7 por ciento), según estadísticas del último informe publicado por la Unión de Comunidades Islámicas de España (Ucide).

Son marroquíes, argelinos, senegaleses, nigerianos, costamarfileños, pakistaníes... y españoles. No en vano, 27.000 de los musulmanes ‘censados’ por Ucide en Almería son de nacionalidad española. Son hijos de inmigrantes nacidos y criados en el país y, en menor medida, conversos al Islam.

La provincia tiene algunas de las comunidades más grandes del país. La Comarca de Níjar, El Ejido, Roquetas de Mar y La Mojonera aparecen destacados en los informes sobre la implantación islámica. “Los  municipios  con  mayor  número  de  conciudadanos  musulmanes  son  Barcelona,  Ceuta,  Madrid  y  Melilla,  seguidos  de  El  Ejido y Murcia”, detalla Ucide en su análisis 2016.

Comunidades
No extraña, por tanto, que el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía señale en un reciente documento que en Almería hay más mohamed que albertos, danieles, raúles o luises. O que las fátimas sean más numerosas que las teresas, raqueles o alicias.

Esta huella de la religión islámica tiene una correspondencia directa en la proliferación de lugares de culto. Almería cuenta con 52 mezquitas, oratorios y centros de estudios árabes, más que cualquier otra provincia andaluza. Solo la capital acumula 13 espacios para el rezo y el estudio.

Únicamente las iglesias cristianas ganan en presencia a los ‘templos’ musulmanes almerienses, según cifras del Observatorio del Pluralismo Religioso en España, órgano vinculado al Ministerio de Justicia y destinado a favorecer el conocimiento entre (o sobre) las confesiones asentadas en el país.

El Ramadán, siempre pendiente de los ciclos lunares, finalizará en 29 ó 30 días. Cada año se realiza una gran oración conjunta en el entorno del Estado de los Juegos Mediterráneos, aunque la escena se repetirá en las mezquitas de toda la provincia de Almería.

También se han programado diversas actividades caritativas (por ejemplo, en el campo de Níjar) y fiestas de final de Ramadán, conocido como Eid al-Fitr. Se prolongan hasta tres días del siguiente mes del calendario musulmán y supone la conclusión del ayuno.