Las críticas realizadas por el portavoz municipal de Ciudadanos, Miguel Cazorla, acusando al equipo de Gobierno de “falta de gestión” y afirmando que solamente se había ejecutado el 10,93% de las inversiones previstas para 2017 han abierto una grieta en la negociación del presupuesto para 2018. Si la intención del edil naranja parecía en todo momento presionar en esta negociación, que no dirige él por su formación, la respuesta encontrada en el alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, muestra más hartazgo que presión.
Así afirmó que espera que se vuelva “a la senda de la sensatez, que la negociación siga como hasta ahora por cauces normales, coherentes y leales, y que el Ayuntamiento de Almería tenga presupuesto lo antes posible. No para mayor gloria del alcalde ni del portavoz de Ciudadanos, sino porque Almería lo necesita”.
Con respecto a las cifras dadas por el partido naranja la versión que mantiene el equipo de Gobierno es que están “totalmente tergiversadas” ya que “hablar de ejecución presupuestaria sumando las inversiones financieramente sostenibles y con la incorporación de remanentes que se hizo el 30 de septiembre, y solo teniendo en cuenta lo que se ha facturado y pagado y no con los contratos en vigor y las obras en marcha, es tergiversar la realidad”.
Así para Fernández-Pacheco los datos dados el pasado martes por Miguel Cazorla son motivo de preocupación ya que “él que presume de ser economista pues me crea la duda de si lo hace por ignorancia o lo hace por maldad porque los datos que dio tienen un trasfondo preocupante” y tilda este mensaje de “tendencioso” más ligado a la negociación que a la realidad de la ejecución.
Expectativas
Cree el alcalde de la capital que la ejecución presupuestaria va a ser “en mejores porcentajes” y dejó claro que “ni calculadora electoral, ni falta de gestión, ni falta de previsión, ni nada que se le parezca.Hay que lanzar un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos, todo es susceptible de mejora”.
Pero más allá de la respuesta dada por el alcalde de la capital a estas declaraciones, lo cierto es que una parte importante de la guerra se está produciendo en las redes sociales. De hecho, tras meses de absoluta tranquilidad en las relaciones entre naranjas y azules, quizá motivadas por la mediación del líder andaluz de Cs, Juan Marín, y la portavoz almeriense, Marta Bosquet, le batalla ‘tuitera’ se ha vuelto a hacer presente.
Si hace unos días era Cazorla quien publicaba que las ayudas a la rehabilitación privada se habían quedado “casi desiertas” y consideraba un “fracaso” estas políticas, horas después le contestaba duramente el concejal de Desarrollo Urbano y Vivienda, Miguel Ángel Castellón, en un tuit afirmando: “El portavoz de @Almeria_Cs es un ignorante o un mentiroso: en los 2 últimos años las ayudas a la rehabilitación se han adjudicada en un 100%”.
Respuesta
Hasta la mañana de ayer esperó el portavoz naranja para responder y lo hacía también vía Twitter: “Quien es el ignorante o mentiroso? @Almeria_Cs no insultamos solo hacemos Propuestas. Aquí están los datos” acompañando sus palabras con una fotografía en la que se muestra que en las actuaciones en zonas consolidadas específicas en 2013 que se dedicó al entorno del Mercado Central de los 500.000 euros de la convocatoria se dieron 47.000; en 2014 para la Almedina hasta La Chanca de 500.000 euros previstos no se concedió ninguna ayuda; en 2015 fue para el entorno de Plaza de Toros y solamente se otorgaron 44.000 euros de los 250.000 presupuestados, mientras que en 2016 de los 100.000 euros solamente se concedieron 25.000.
De momento no hay más respuestas pero teniendo en cuenta que la negociación presupuestaria continúa y que la voz cantante no la lleva el Grupo Municipal de Cs, parece que la tensión seguirá.
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