“Tengo la sensación de que en Almería vamos a dar la campanada”

Juan Marín transmite, como toda la organización naranja, mucho optimismo y mucha confianza en los resultados. Hace solo cuatro años debutaban en el Parlamento Andaluz. Ahora aspiran a ganar. 

¿Qué les dicen sus sondeos ante el 2-D?

Fundamentalmente que los andaluces han entendido la utilidad de casi cuatro años en el Parlamento de Andalucía, y que realmente tenemos unas expectativas. De momento Ciudadanos es la única fuerza política que sigue creciendo, y de una manera muy importante. Todo esto antes de que se dé el pistoletazo de salida el día 16. Por lo tanto aspiramos absolutamente a todo. 

¿Qué es todo?

Nuestro objetivo es gobernar Andalucía y cambiar el gobierno. Estamos en condiciones de poder competir, cosa que hace tres años y medio era muy difícil. Ciudadanos tenía entonces 1.200 afiliados en Andalucía y hoy somos 39.000, con estructuras en las ocho provincias, cerca de 400 agrupaciones y grupos locales, y eso nos permite llegar casi al 95% de los andaluces en estas elecciones autonómicas. Ese es el escenario que se nos dibuja y hay que hacer un buen trabajo, explicarle a los andaluces qué es lo que queremos hacer, no solamente decir lo que está mal. Así que estamos optimistas, creo que va a ser una campaña muy dura, pero cargada de ilusión y de esperanza en ese cambio. 

¿Y eso cómo se traduce en franja de escaños?

Aquí hay un gran reto que es ser capaces de ser primera o segunda fuerza política en aquellas provincias donde más representación hay y ver el conjunto de resultados a nivel autonómico. A lo mejor podemos ganar las elecciones en votos pero no en escaños, precisamente por una ley injusta que el Partido Socialista y el Partido Popular no han querido cambiar. Pero le soy sincero, cuando digo que por primera vez en Andalucía se da una situación que nunca se había dado, es que hay una posibilidad real de que varias fuerzas políticas puedan aspirar a ganar unas elecciones, y ahí es donde vamos a competir. No soy capaz de vaticinar cuántos escaños porque la pelea política va a ser muy apretada y muy disputada.

¿En Almería por dónde van sus expectativas?

Bueno, en el caso de Almería lo primero que tengo que decirle es que estoy muy orgulloso del equipo. Tenemos una Marta Bosquet que ha sido un buque insignia de la política de Andalucía en los últimos cuatro años y que ha hecho un trabajo por Almería  impresionante, y después se han incorporado personas de una valía y una capacidad brutal. Andrés Samper, médico del SAS,  Mercedes López, una persona sorprendente... La verdad es que nos hacen tener muchas expectativas y creo que en Almería vamos a hacer un resultado que nadie se espera, salvo nosotros. Tengo una sensación de que podemos dar la campanada aquí. 

¿Mínimo doblar?

Vamos a pelear por un resultado mucho mayor.

¿A partir de tres?

A partir de tres vamos a pelear seguro. 

Ciudadanos ha dicho que no volverá a apoyar a Susana Díaz en una investidura. Pero en función de la aritmética parlamentaria, y si estuviera en juego la gobernabilidad de Andalucía, ¿reconsideraría su negativa?

No, el voto de Ciudadanos no va a servir para que Susana Díaz y el PSOE sigan gobernando. 

¿No es no?

No es no. Es no porque lo que se ha roto es la confianza. Hace tres años y medio tomamos una decisión muy difícil después de 90 días de bloqueo, los andaluces la han valorado, si no no estaríamos en los datos que ahora dicen los sondeos, pero firmamos un documento, no dimos un cheque en blanco. Y la señora Susana Díaz dijo el pasado 4 de septiembre que no cumplía lo que había firmado en materia de regeneración. Después de ese momento creo que poco más teníamos que hablar. Y cuando se rompe la confianza es muy difícil de recuperar. 

¿Aun en situación de bloqueo de la gobernabilidad como estaba en la anterior?

Es que la situación hoy no tiene nada que ver con la de hace cuatro años. ¿Cómo se puede fiar uno de los que ya han incumplido su parte? Por lo tanto, el no es no es firme. Y no se va a mover, sea cual sea el resultado el 2 de diciembre. 

¿Y en la misma situación de aritmética y de gobernabilidad, darían ustedes su apoyo a Juanma Moreno?

Hombre, yo lo que espero es que Juanma Moreno ya se haya replanteado el poder apoyar a Ciudadanos para que nosotros tengamos la presidencia de la Junta de Andalucía y podamos gobernar. Porque el Partido Popular  lleva cuarenta años cosechando trofeos de consolación. En apenas cuatro, Ciudadanos ha llevado a cabo más propuestas útiles para los andaluces que el PP, que no ha conseguido nada, ni para bajar impuestos, ni para mejorar la vida de los andaluces, ni para mejorar la sanidad, ni la educación ni las políticas sociales. No ha arrimado el hombro nunca. 

Supongo que parte del supuesto de que ustedes tuvieran más escaños que el PP. ¿Si fuera el revés?

Si lo que nosotros aspiramos es a cambiar el Gobierno, ¿cómo vamos a poder plantearnos ni tan siquiera que los que llevan cuarenta años en el victimismo o la resignación puedan gobernar Andalucía? Yo creo que el cambio al que aspiran los andaluces hoy pasa por que gobierne Ciudadanos. Es el objetivo que nos hemos marcado. 

¿Cree que le pueden hacer el sorpasso al PP?

El sorpasso no. Yo creo que le podemos ganar las elecciones al PP y al PSOE. Por eso vamos a pelear. Mi enemigo no es Juanma Moreno ni Susana Díaz, mi enemigo es el paro, las listas de espera, que una señora se lleve cuatro horas de espera de un hospital… Es que Adalucía se ha convertido en una sala de espera gigantesca, donde los andaluces llevan esperando cuarenta años a que las cosas cambien. 

Pero para gobernar hay que entrar en el juego de las alianzas. Parece claro que no va a haber una mayoría absoluta. 

Bueno, yo creo que la ilusión va a poder más que la resignación, hay mucho hartazgo. 

¿Pero confía en una mayoría absoluta?

No, pero yo creo que podemos ganar con un resultado suficientemente bueno como para poder buscar apoyos para echar a andar esta legislatura. En Cataluña parecía que nadie le podía ganar a los independentistas, y la ilusión pudo más, hubo una alta participación e Inés Arrimadas ganó las elecciones. Después, la Ley electoral hace su trabajo, que para eso la diseñan los grandes partidos. Todo pasa por que realmente los andaluces crean que el cambio es posible. ¿Y ese cambio qué significará? Significará abrir las ventanas de una administración que tiene que acompañar a los andaluces y que no sea un obstáculo. El PP y PSOE son lo mismo.

Alianzas con Adelante Andalucia las da por descartadas... 

Somos incompatibles. 

¿Cuáles son sus líneas rojas?

En materia fiscal hemos tenido siempre una visión completamente diferente, incluso en la financiación autonómica. Nosotros creemos que es posible la colaboración público-privada. Hay que apostar por los que generan empleo y actividad económica, como las empresas, los autónomos, los emprendedores. IU y Podemos han dicho no a la ley de emprendedores, no a la reforma fiscal, no a todo lo que hemos planteado durante cuatro años, así que hay poco o nada que hablar. Esto no va solo de subir los impuestos, esto va de hacer unas políticas más eficaces y ahí estamos en las antípodas. Lo extraño es que el PP ha estado muy de acuerdo con esta forma de hace política,  y cuando ha llegado la hora de bajar los impuestos, el PP ha votado en contra con Podemos e Izquierda Unida. Hay cosas que no se pueden entender. 

¿A Ciudadanos Andalucía le ha variado el rumbo Albert Rivera?

No, en campaña se dicen muchas cosas y muchas  sin sentido ni conocimiento. 

¿No ha marcado Rivera las directrices de la ruptura del acuerdo con el PSOE?

En absoluto. Albert Rivera siempre ha respetado todas las decisiones que se han tomado en el Grupo Parlamentario. Las hemos trasladado lógicamente a la Ejecutiva nacional, porque Ciudadanos es un solo partido, no son 17 reinos de taifas. Hasta ahora  todas las decisiones se han aprobado en la ejecutiva nacional por unanimidad. Todas. Eso dice mucho. Que Albert Rivera sea una persona que goza de la valoración de la inmensa mayoría de los españoles. O que Inés Arrimadas también, entiendo que no le guste a Susana Díaz porque igual ella no puede presumir de tener esa misma relación con Sánchez. 

Imaginemos que le salen bien las cuentas y se sitúa al frente de la Junta. ¿Contaría con almerienses en su gobierno?

No le quepa la menor duda.

¿Y tiene claros los nombres ya?

Algunos sí. Aunque me va a permitir que no se los diga (Risas). Pero sí tengo nombres en mi cabeza, claro. 

¿Tiene un gobierno pensado?

Tengo una estructura, lógicamente. Cuando uno se presenta para ser presidente de la Junta de Andalucía no puede esperar a ver qué pasa el 2 de diciembre e improvisar. Tengo más o menos claros cuáles son los temas en los que depositar el mayor peso de las políticas y además tienes que pensar en personas que puedan llevar a cabo esa responsabilidad. Tenemos un equipo para gobernar Andalucía. 

¿Qué corregiría de lo que se ha hecho hasta ahora respecto a Almería, cómo acercaría Almería a la Junta o viceversa?

Andalucía no se puede ver como una confrontación entre provincias. Esto no va de eso. Almería necesita infraestructuras que hay que concluir. No hablo solo de la autovía del Almanzora, hablo de garantizar el agua de riego. Y para eso el esfuerzo no es excesivo por parte de la Junta. Después hay que poner en marcha muchas iniciativas para fomentar el emprendimiento y agilizar todos los trámites administrativos y burocráticos, medidas que tienen que ver con la creación de empleo, y de fijar la población al territorio. Y tenemos que poner a profesionales por capacidad y mérito al frente de muchas áreas que es necesario mejorar. Si eso lo hacemos no solo en Almería, sino en el resto, y vertebramos este territorio, volveremos a recuperar la confianza de los andaluces en las instituciones, y ya Almería no se sentirá tan lejos del conjunto de los andaluces. Esa sensación también la tienen los jienenses, y lo entiendo.

Ciudadanos ha cuestionado la necesidad de traer AVE a todas las provincias. 

No, la necesidad no, lo que hemos planteado ha sido la viabilidad de muchos de los proyectos, porque es muy fácil prometer.

Pero respecto al AVE de Almeria, ¿cuál es su posición?

Mi posición es que el AVE tiene que llegar a Granada y a Almería, está claro. El problema está en cómo, con qué medios y en cuánto tiempo. Lo que hay es que dar respuestas y soluciones, que no se engañe a la gente. Porque son inversiones muy costosas y la inmensa mayoría no son rentables, pero sí ofrecen una oportunidad de desarrollo al territorio muy importante. A nosotros nos gustaría que llegara a todos lados, pero todos sabemos que eso no es posible. Y hay que hablar de una vez por todas a la gente con claridad, y decirles, mire usted, el AVE a lo mejor está en el 2025 si nos ponemos a trabajar ahora en serio todas las administraciones, y dejamos de hacer inversiones en lo que no es necesario, hay que evaluar la eficacia de la gestión. Y una cosa importante, para desarrollar infraestructuras lo primero que hay que apostar es por las inversiones públicas. Y una administración que dedica el 0,7% de su presupuesto no apuesta por las infraestructuras. Por eso nosotros planteamos llegar al 1,5% del PIB en la próxima legislatura. Eso sí que es una apuesta. 

¿Están recibiendo trasvase de militantes o simpatizantes de otros partidos?

Sí, del PP y del PSOE también. Pero es verdad que hay mucha gente del PP que se está sumando. 

¿Eso no se ha frenado con Casado?

No, no. 

¿En qué mensaje van a centrar la campaña?

La reactivación económica, medidas de reforma fiscal que permitan que las empresas se puedan instalar en Andalucía en unas condiciones mucho más competitivas, con menos trabas y con más alivio fiscal, son cuestiones que vamos a defender. Pero no nos podemos olvidar de recuperar la confianza en las instituciones, la regeneración democrática es una pata fundamental. 

¿Cuáles serían las primeras medidas que tomaría si gobernara?

La primera sería una auditoría. Si entramos el día 2, en cuanto tengamos posibilidad de tomar posesión informaremos a través de la Cámara de Cuentas para poner en marcha una auditoría de en qué situación realmente nos encontramos, cuánto se ha destinado a los cursos de formación, a los ERE, a las tarjetas… todo eso aclararlo. 

¿Pondría la Junta patas arriba?

Vamos a abrir las ventajas y levantar las alfombras, no le quepa duda. Y eso yo creo que es lo que muchos están temiendo. Pero hay que hacerlo, y esto no va de venganza, sino de justicia. Yo creo que los andaluces necesitan saber. La clase política se tiene que acostumbrar a dar explicaciones. La señora Díaz no se puede estar escondiendo ahora y no respondiendo a cuestiones que afectan a todos los andaluces. Cuando hablamos de Presupuestos Generales del Estado, ¿qué opinión tiene la señora Díaz de que el señor Sánchez mande al señor Iglesias a negociar con Junqueras que hace apenas ocho años decía que los andaluces genéticamente éramos una raza inferior a los catalanes y que ellos tengan en su mano la posibilidad de decidir los Presupuestos que van a afectar a nuestra comunidad autónoma en los próximos años? 

¿Pero es positivo traer esos mensajes a una campaña andaluza?

No sé si es positivo o negativo, pero de los Presupuestos Generales del Estado que se aprueben, Andalucía recibirá más o menos fondos para mejorar su sanidad, sus políticas sociales, su educación, y su sistema fiscal, y eso afecta al bolsillo de todos los andaluces. ¿Que hay que hablar con acento andaluz? Yo estoy dispuesto a hablar de todo, pero no podemos obviar que España, nos guste o no, tiene un sistema de cesión de determinadas competencias a las comunidades autónomas y que para eso hace falta financiación y que eso depende de los Presupuestos Generales del Estado, y que eso lo están decidiendo hoy el señor Iglesias, el señor Sánchez y el señor Junqueras. ¿Y Andalucía no tiene nada que decir?