Multas de hasta 200 euros si no usas bien el regalo de estas Navidades

En las próximas semanas, un buen número de patinetes eléctricos aterrizarán a los pies de los árboles de Navidad de los almerienses. No en vano, el vehículo de moda ha visto incrementadas sus ventas en hasta un 20 % respecto al año pasado y ya son muchos los que recurren a él para desplazarse por la ciudad.

No obstante, antes de arrancar el patinete eléctrico que traigan Papá Noel o los Reyes Magos hasta nuestro hogar, conviene repasar cuáles son las normas de circulación a las que hay que atenerse a la hora de circular por la ciudad.

Por ahora, esa norma es únicamente local, ya que no hay una normativa de circulación que afecte a todos los municipios españoles en lo relativo al uso de bicicletas, patinetes y otros vehículos similares. Así, la Ordenanza de Circulación de Peatones y Ciclistas de la Ciudad de Almería es el documento que hay que tener en cuenta a la hora de usar un nuevo patinete.

¿Por dónde se circula?

La primera gran cuestión que debe resolver el propietario de un patinete eléctrico no es otra que el lugar por el que deberá circular. Y el carril bici es la respuesta. De hecho, la normativa municipal determina que cualquier vía segregada es la adecuada para el tránsito con patinetes con tal de no circular por la calzada, junto a coches y motos.

Así, los patinetes eléctricos también podrían llegar a circular por las aceras en lugares en los que no haya carril bici (y, obviamente, su circulación está permitida también en las llamadas aceras-bici). No obstante, a la hora de circular en patinete por la acera hay una importante condición a tener en cuenta: tenemos que adecuar nuestra marcha a la de los peatones y, en cualquier caso, en la acera no podremos pasar de los 10 kilómetros por hora.

Precisamente, respecto a la limitación de velocidad, la normativa deja claro que, en el resto de vías ciclistas, como el propio carril bici, (por las que, efectivamente, también pueden circular patinetes, monopatines e incluso sillas y triciclos de personas con movilidad reducida), "los usuarios deberán mantener una velocidad moderada" que nunca deberá ser superior a los 25 kilómetros por hora.

Prohibiciones

Respecto a las cuestiones que están prohibidas cuando tenemos el manillar de un patinete eléctrico en las manos, dos sobresalen especialmente: mientras circulamos por las calles de Almería sobre sus dos ruedas, la normativa prohíbe llevar auriculares o utilizar el teléfono móvil.

De hecho, saltarse cualquiera de estas dos prohibiciones implican una infracción grave, para las que la ordenanza municipal recoge una de sus más duras sanciones: 200 euros de multa en caso de ir con los auriculares puestos mientras transitamos por la ciudad.

¿Dónde aparco?

Lo cierto es que este punto queda algo olvidado en la normativa del Ayuntamiento de Almería. Así, no se recoge ningún punto relativo al aparcamiento de patinetes (eléctricos o no) en las calles de la ciudad, lo cual dejaría en el limbo la futura llegada de servicios de patinetes de alquiler (algo que, a día de hoy, no se espera en Almería y que ya ha provocado sendas polémicas en ciudades como Madrid y Valencia).

No obstante, podría aplicarse lo que la ordenanza regula respecto al aparcamiento de bicicletas: deben dejarse en los aparca bicicletas repartidos por la ciudad, pero pueden llegar a encadenarse en farolas, semáforos y otros elementos del mobiliario urbano en caso de que no haya ningún aparcamiento en un radio de 75 metros.

Multas

Al incumplir alguna de estas normas, los almerienses que circulen por la ciudad en patinete eléctrico se podrían enfrentar a distintas sanciones. Así, ir a más de 10 kilómetros por hora en la acera y no adecuar nuestra marcha a la de los peatones podría costarnos una multa de 50 euros.

Como hemos citado anteriormente, la multa podría llegara a ser de hasta 200 euros si usamos auriculares mientras vamos en patinete eléctrico. Esa multa también afectaría a los usuarios que circulen "realizando maniobras bruscas, con grave riesgo para los peatones".

Así, cuando bajo el papel de regalo se descubra un flamante patinete eléctrico, lo ideal es repasar y tener en cuenta estas normas para evitar que el regalo termine en un susto en forma de multa.