El CIS de Almería llevará el nombre de un funcionario asesinado por ETA

El nuevo Centro de Inserción Social de Almería honrará la memoria del funcionario de prisiones Manuel Pérez Ortega, asesinado en un atentado terrorista en Sevilla en junio de 1991. La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias coloca su nombre sobre la fachada principal de las instalaciones ubicadas en el Polígono Sector 20, dedicadas a la custodia de los internos clasificados en tercer grado.

Manuel Pérez Ortega tenía 39 años de edad, era soltero y trabajaba como funcionario de prisiones en el centro penitenciario de Sevilla, su ciudad natal. El 28 de junio de 1991 gestionó la recepción de un paquete enviado a nombre del entonces director del penal, Javier Romero. El escáner mostraba una imagen opaca y el peso hacía levantar las sospechas de los funcionarios. La explosión acabó con la vida de Manuel Pérez Ortega, con dos reclusos y con un ciudadano que acudía a visitar a un familiar.

El suceso generó una enorme huella entre los funcionarios de prisiones y provocó un amotinamiento dentro del penal sevillano, donde algunos presos comunes trataron de linchar a internos de la banda terrorista ETA en otros centros penitenciarios españoles.  El episodio también aconsejó una revisión profunda de las medidas de seguridad preventivas en los centros penitenciarios. Los terroristas colocaban a los funcionarios en el punto de mira.

Casi tres décadas después el Ministerio del Interior elige a Manuel Pérez Ortega como figura emblemática del espíritu de dedicación de los funcionarios de prisiones y coloca su nombre al nuevo CIS de Almería, adscrito al centro penitenciario El Acebuche.

Seis años de espera
El CIS es un proyecto de ampliación de los recursos de prisiones en Almería anunciado durante la última etapa del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE). El PP  asumió esa ‘herencia’ y terminó la obra en las proximidades de El Puche, sin embargo, nunca llegó a dotarlo de material ni de personal para su apertura.

Las dependencias han estado abandonadas durante seis años e, incluso, han sido visitadas por dirigentes de populares y socialistas para evaluar su posible reconversión en un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE). Finalmente, el Gobierno apuesta por su apertura y ya ultima los trámites necesarios. Ya libró una partida para su dotación de mobiliario y ahora Instituciones Penitenciarias trabaja en la configuración del personal.

El CIS funcionará de forma autónoma como último paso ante de la salida en libertad de los internos en tercer grado, aunque dependerá de la dirección de El Acebuche. El centro Manuel Pérez Ortega espera fecha de inauguración.