La ampliación de los módulos de custodia temporal de inmigrantes irregulares, ubicados en el extremo más occidental del Muelle de Poniente, tendrá todavía que esperar. El Puerto de Almería ha programado nuevas obras para mejorar la dársena y permitir el acceso de vehículos de mayor envergadura, una actuación que supone en la práctica un aplazamiento de los planes de crecimiento del Centro de Atención Temprana de Extranjeros (CATE).
La Autoridad Portuaria, presidida por Jesús Caicedo, atendió las demandas de la Subdelegación del Gobierno en Almería e invirtió 250.000 euros para extender la dársena de las pateras 35 metros más. El objetivo era doble, a saber, permitir el atraque de embarcaciones de las fuerzas de seguridad y salvamento y, al mismo tiempo, ganar espacio para levantar algún módulo adicional a la actual estructura.
Las obras se pagaron del Fondo de Compensación Interportuario, gestionado por Puertos del Estado, y se desarrollaron durante los meses de noviembre y diciembre, como adelantó LA VOZ DE ALMERÍA. La Comisaría Provincial de la Policía Nacional en Almería esperaba con gran interés la apertura por la incorporación de, al menos, un módulo para almacenar alimentos y materiales de seguridad. Mientras Salvamento Marítimo iba a ganar espacio para amarrar a sus buques más grandes directamente junto a los módulo (ahora desembarcan en otra zona del puerto y son trasladados en autobús).
Sin embargo, ninguna de las dos expectativas se han cumplido de momento. Las obras alcanzaron un calado insuficiente junto a la dársena. Según técnicos consultados por LA VOZ, solo se consiguieron unos cuatro metros y medio de profundidad frente a los ocho necesarios para el barco SAR Mastelero.
Al mismo tiempo, la Policía Nacional carece de nuevas instalaciones que debían ser asumidas por la Subdelegación del Gobierno que encabeza Manuel de la Fuente.
Y las pateras no han dejado de llegar. Contrariamente a los mensajes lanzados por el Gobierno central, el número de pateras se mantiene. Hasta mediados del mes de mayo han llegado al Puerto de Almería 1.800 inmigrantes irregulares, un 10 por ciento más que en el mismo periodo del año pasado.
Segunda fase
La segunda fase de las obras sufragadas por el Puerto de Almería consisten en la ejecución de un relleno a base de escollera de 1 a 1,5 toneladas para la formación de un manto exterior, y de escollera de 250 kilos para la formación del relleno interior. La escollera se recebará con grava y zahorra artificial, y sobre la misma se extenderá un pavimento de hormigón con mallazo de acero. Asimismo, se colocarán dos postes (noráis) para el amarre de las embarcaciones de Salvamento Marítimo.
Una vez realizados los trabajos de ampliación de la explanada se facilitará el acceso de vehículos de mayor dimensión, así como los de tipo grúa y camiones pluma, que en determinadas circunstancias tienen que acceder al morro del muelle para labores de explotación y mantenimiento, y que ahora, debido las instalaciones del CATE, tienen dificultades para poder maniobrar.
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