El presidente del Colegio Oficial de Médicos de Almería, Francisco Martínez Amo, ha hecho especial énfasis en los últimos días en la necesidad de reconducir el tratamiento de la información sobre la epidemia del coronavirus, puesto que lo considera fundamental para evitar que se dispare el pánico y el alarmismo que, a su juicio, puede afectar gravemente a la estabilidad de la sociedad y a la economía, y “llevar a Europa a la ruina”.
Martínez Amo incluso ha lanzado una propuesta sobre la forma en que a su entender las administraciones sanitarias y políticas deberían gestionar la comunicación sobre el Covid-19: “La información debería centralizarse, y ser ofrecida por las autoridades sanitarias a través de los medios y siempre a unas horas determinadas varias veces al día, para que la gente sepa cuándo recibir una información oficial, veraz y rigurosa”.
Para él, con ello se evitaría la circulación de “informaciones tendenciosas lanzadas por chiquilicuatres que ponen los pelos de punta”. “La gente debe ser informada, pero no bombardeada”, resume.
Ávida de información
A su juicio, “la gente está ansiosa por recibir esta información veraz y de verdaderos expertos sobre el coronavirus, y lo veo yo, porque en seguida se acercan muchas personas a mi cuando surge esta conversación”.
El doctor Martínez Amo piensa que solo con esta información veraz podría mitigarse la alarma que cada vez se extiende más entre la población, debido a las medidas que se están adoptando, pero no por la gravedad de los efectos de este virus, sino para intentar frenar su propagación. Porque como dice, el coronavirus “tiene una virulencia débil, no es ni mucho menos el ébola”, pero sí cuenta con una gran capacidad de transmisión, que no solo puede producirse por contacto directo con infectados, sino también a través de “monedas o del pomo de una puerta”, una vez que, como dice, parece haberse demostrado que el virus puede permanecer varias horas en ellos.
A pesar de esta facilidad de contagio, el presidente de los médicos almerienses se muestra cauto respecto a la posibilidad de que en España se repita en los próximos días la situación que ha padecido Italia estas semanas atrás; de que en Andalucía y Almería puedan adoptarse decisiones como las tomadas en Madrid con el cierre de todos los centros educativos; o de que peligre la celebración de la Semana Santa, como ya se está especulando. “Sobre todo esto es fácil acertar y es fácil equivocarse, pero lo cierto ahora es que lo que necesita la población es una información veraz y centralizada, porque esto es una guerra”.
Pensando en la 'posguerra'
“Y ya pensando en el futuro, hay que esperar y trabajar para que la 'posguerra' no sea mala, porque puede tener muchos efectos perjudiciales para las empresas, para el turismo y la economía española y Europea”, añade.
De ahí a que reitere la importancia de que las autoridades informen correctamente y sepan transmitir un mensaje adecuado. Aunque a su juicio las administraciones sanitarias españolas están adoptando, en general, buenas decisiones, también critica algún que otro error.
“No es normal permitir una manifestación y al día siguiente cerrar los colegios”, dice en referencia a la movilización del Día de la Mujer en Madrid, que fue autorizada a pesar de que la Administración debería haber tenido ya en su poder información y datos sobre la incidencia del virus en la capital que quizás no la hacían aconsejable.
Saber lo que hacer
Francisco Martínez Amo afirma que es muy importante que los médicos y la sociedad en general sigan las recomendaciones y directrices de las autoridades sanitarias para poder controlar este virus y “para que la gente sepa lo que tiene que hacer y lo que no”, e insiste en que deben asesorarse con expertos en comunicación para ofrecer con rigor y exactitud los mensajes necesarios a la población.
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