Nobel Perdu, el profesor persa de la UAL que practica la fe bahá’i

El tiempo pasa cadencioso y los estudiantes entran en el ecuador del primer trimestre, incluso para la población universitaria, que mide su calendario por semestres, la vuelta de las vacaciones invernales es un breve lapsus de tiempo para que en un abrir y cerrar de ojos ya estén los exámenes parciales llamando a la puerta. Y es que en todos sitios cuecen habas, como reza la sabiduría popular, salvo en Irán, que cuecen ‘poló’, arroz con diferentes salsas de carne y verduras, con un poco de picante y mucho sabor. Unas veces con almendras o pistachos y otras con azafrán, naranja o pétalos de rosa.

Una rica fuente de energía para afrontar la rutina académica con vigor sin temor a flaquear ante libros y apuntes, la normalidad del estudiante universitario. Sin embargo, en el país persa existe un segmento en su población juvenil que no puede llevar una vida académica equiparada a la de sus colegas de clase. Los jóvenes pertenecientes a la fe bahá’i, deben mantener sus creencias en el anonimato si aspiran a terminar su formación universitaria.

Para el profesor de la Universidad de Almería, Nobel Augusto Perdu, de origen persa y creyente en las enseñanzas que fueron reveladas por Bahá’u’lláh, la situación que viven los jóvenes bahá’is en las aulas del sistema universitario iraní, merece ser analizada y puesta sobre la mesa de la comunidad internacional, pues profesar una religión u otra no puede ser el motivo de fracaso académico, ni el freno del desarrollo vital y profesional de las personas, explicaba el profesor Perdu.

Una corriente religiosa perseguida desde el momento de su revelación

Según PopulationPyramid.net, la población juvenil en Irán ha ido en aumento a lo largo de los últimos años, superando a España en la curva de crecimiento. En los muestreos de 2020, se ha contabilizado que, de una población de 80 millones de habitantes, 6,7 millones son jóvenes entre 25-29 años, 5,5 entre 20 y 24 y 5,5, entre 15 y 19.

De entre todos ellos existe una mayoría chií, seguida por sunníes, cristianos, judíos y zoroastras, lo que no abundan en los cómputos son bahá’is. El profesor Perdu expone que poco antes de llegar su graduación, los jóvenes baha’is son expulsados y sus expedientes eliminados de todo rastro.

Pregunto al docente de la UAL ¿qué está pasando sistemáticamente en los últimos 42 años desde que triunfara la Revolución Islámica? Desde 1979 y de manera continuada hasta hoy, toda la comunidad bahá’í de Irán, la mayor minoría religiosa no musulmana del país ha sido objeto de una persecución continúa, que afecta a cada uno de sus miembros a lo largo de generaciones y en todas las fases de la vida.

“En 1993, el Representante Especial enviado por Naciones presentó pruebas irrefutables de que el gobierno había adoptado un programa maestro para la estrangulación silenciosa de la comunidad bahá’i. En otras palabras, para detener el progreso y el desarrollo de esta comunidad”, indicó el profesor Perdu.

Unas prácticas que chocan con las resoluciones aprobadas por las Naciones Unidas, a propuesta de la Comisión de Derechos Humanos, que insta a Irán que “elimine, en la ley y en la práctica, todas las formas de discriminación por motivos de pensamiento, conciencia, religión o creencias".

Iniciado por la primera bahá’i del país

En 1947, la norteamericana Virginia Orbison se convierte en la primera persona bahá’i residente en España y la arquitecta de la Asembla Espiritural Local de Madríd. 20 años más tarde, el profesor Perdu entra en contacto directo con ella. ¿Qué mejor fuente de conocimiento que aquella que hizo acopio de las enseñanzas de Bahá’u’lláh así como de las reflexiones de éste, para iniciar a un joven Nobel Perdu en el camino de la Fé Bahá’i?

Enseñanzas que calaron hondo en la personalidad del docente de la UAL, orientando su vida a colaborar de manera activa en defensa de los derechos de la comunidad Baha’i, desde la trinchera de la traducción de textos.

Su dominio nativo de la lengua inglesa y española le ha servido para ingresar en el Panel Internacional de Traductores de Textos Bahá’i a lengua hispana, una labor que, sumada a la docencia que le ha valido para seguir la actualidad educativa de los estudiantes bahá’ i de Irán.

Nobel Perdu es tajante sobre la situación de la minoría bahai en el país persa. “A menos que se garanticen los derechos de todos los segmentos de la sociedad, nadie puede estar seguro de que sus propios derechos no sean violados”. y advierte del perjuicio personal y moral que supone hacer desaparecer la vida académica de cualquier estudiante tras años de esfuerzo. Negándole el desarrollo académico y profesional.