La calidad del aire es “extremadamente desfavorable” en dos zonas de Almería

Solo una semana después, cuando muchos almerienses habían limpiado ya sus casas y vehículos, y los ayuntamientos habían ejecutado planes especiales de limpieza, el polvo sahariano en suspensión ha vuelto a hacer acto de presencia en la provincia. Y aunque el barro acumulado sea el efecto más visible y molesto, la calima puede provocar graves efectos para la salud, teniendo en cuenta, por ejemplo, que este viernes la calidad del aire es “extremadamente desfavorable” en algunos puntos del territorio provincial, como El Ejido y la capital, según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).

Los informes del Índice Nacional de Calidad del Aire del Ministerio señalaban que a las 16:00 horas dos zonas de Almería  presentaban ese nivel extremadamente desfavorable por la presencia de partículas de polvo en suspensión, además dos de las mayores poblaciones de la provincia, como son la capital y El Ejido.

La peor situación a esa hora la tenía El Ejido, que en el factor contaminante denominado ‘PM-10’ (partículas en suspensión menores a 10 micrones) presentaba 520,4 µg/m³  (micrómetros por metro cúbico).

Hay que tener  en cuenta que la calidad del aire se considera buena y satisfactoria, y por tanto no presenta riesgos para la salud, en el caso de que los micrómetros por metro cúbico de partículas dispersas en la atmósfera con diámetro inferior a 10 micrones se sitúen entre 0 y 50 µg/m³ (micrómetros por metro cúbico). A partir de este nivel se considera que la contaminación es perjudicial para la salud.

Multiplicado por diez

Por tanto, El Ejido multiplicaba por 10 ese límite perjudicial. Según otros portales especializados en meteorología, El Ejido ha llegado a superar por la mañana los 900 µg/m³, mucho más desfavorable aún, pero hay que recordar que la semana pasada alcanzó los 2.400  µg/m³.

Por su parte, en Almería capital se alcanzaba un nivel de 267.9 µg/m³  en el mismo factor contaminante y a la misma hora, que el Ministerio considera igualmente “extremadamente desfavorable”. No en vano, quintuplica los límites considerados saludables. Esto ha sido así a pesar de la lluvia caída durante todo el día, que teóricamente debería reducir el nivel del polvo en el aire.

Según el Miteco, esta calidad del aire lleva a que la población entera de la zona afectada “puede verse gravemente afectada”. Y ante esta situación recomienda a la población en general que se reduzca toda la actividad al aire libre y considere realizar las actividades en el interior o posponerlas para cuando la calidad del aire sea buena o razonablemente buena. Se aconseja también utilizar la protección adecuada para los trabajos que deban ser realizados al aire libre.

En cambio, para los grupos de riesgo y personas sensibles por enfermedades respiratorias, el Ministerio aconseja evitar la estancia prolongada al aire libre y seguir el plan de tratamiento médico meticulosamente, así como acudir a un servicio de urgencias si el estado de salud empeora. 

Situación "desfavorable" en Bédar y Carboneras

En mejor situación, aunque también por encima de los límites saludables se encontraba la calidad del aire medida en otras dos estaciones atmosféricas de la provincia, las de Bédar y de Carboneras, ambas con índices muy similares. En Bédar, a las cuatro de la tarde el aire tenía un nivel de polvo en suspensión de 69  µg/m³, y en Carboneras de 67,7. Para el Miteco en ambas poblaciones la calidad del aire es considerada “desfavorable”, por lo que señala que “toda la población puede experimentar efectos negativos sobre la salud, y los grupos de riesgo efectos mucho más serios”. 

En este caso, para la población en general aconseja reducir las actividades prolongadas y enérgicas al aire libre, especialmente si se experimenta tos, falta de aire o irritación de garganta, y a los grupos de riesgo y personas sensibles recomienda “reducir las actividades al aire libre, y realizarlas en el interior y seguir las indicaciones del plan de tratamiento médico “meticulosamente”.

En cambio, desde Bédar hacia el Levante la calidad del aire es razonablemente buena, como ocurre en Mojácar, e incluso buena, como en Palomares.