Conseguir que las piezas que se encontraron durante las excavaciones realizadas en el Mesón Gitano vuelvan a su lugar de origen está siendo un procedimiento largo pero que entra en su fase final.
Hasta el momento el Ayuntamiento de Almería y la Delegación Territorial de Cultura han cerrado un acuerdo en las piezas que actualmente están custodiadas en el Museo de Almería, tal y como requiere la normativa, y que pasarán a formar parte de la exposición permanente del Mesón Gitano. Esa memoria con las piezas que van a viajar desde la Carretera de Ronda hasta la calle Fernández todavía requiere un paso más, ser aprobada por parte de la Consejería de Cultura en Sevilla. Para ello esta semana se ha firmado el informe correspondiente en Urbanismo y se ha enviado a la capital hispalense con lo que, todo queda a la espera de que haya una resolución.
Desde Cultura tienen claro que no va a haber mayores complicaciones en cerrar un procedimiento en el que hay acuerdo aunque sí reconocen que, como todo lo que conlleva el velar por el patrimonio, requiere un largo y trabajoso trabajo.
En este proceso administrativo, desde el Ayuntamiento no solo han tenido que acordar las piezas que necesita sino que, además, han tenido que realizar un informe explicando detalladamente la forma en la que se va a hacer el transporte de las piezas para que estas se integren en la musealización del Yacimiento Arqueológico Barrio Almohadí, y esto también le ha sido proporcionado a la parte de Cultura de la administración autonómica.
Musealización
Con respecto a los trabajos de musealización del edificio, explican desde Urbanismo que se siguen preparando por parte de la empresa Avanzia Aplicaciones S.L. y que todo transcurre con normalidad y esperan poder realizar pronto las labores en el interior del edificio.
Cabe recordar que la musealización prevista en esta zona se sustenta sobre cinco ejes: la excavación y puesta en valor del Mesón Gitano; los restos constructivos; cultura material, economía y vida cotidiana; el Paisaje Urbano; y la Almería Almohade.
El punto fundamental de esta musealización es la puesta en valor de los restos arqueológicos de 17 viviendas de los siglos XI y XII. Para disfrutar de ellas los visitantes encontrarán paneles con información en cada frontal, así como en las zonas donde se encuentran los restos arqueológicos poder disfrutarlos a través de realidad aumentada con una app.
Pues bien, además de adaptar la cartelería, el plus que se aporta es la colocación de una tablet junto a cada una de las zonas, con acceso a la app diseñada por si el visitante decide no descargar la aplicación en su terminal.
Quizá uno de los cambios más atractivos se sitúa en los vinilos que se había previsto justo en el lado contrario a los restos arqueológicos y que pretende contextualizar el yacimiento en la ciudad.
La silueta
Pues bien, finalmente se ha optado por realizar el boceto de un skyline de la ciudad de Almería en 1877, según explica la propia empresa en su propuesta.
Para ello han redibujado un grabado de la época “separando por capas los diferentes momentos del paisaje. Se han colocado, de forma parecida a las lamas del mobiliario, unos delante de otros jugando con la profundidad y las separaciones entre ellos. Resultando un muro corrido con capas de corpóreos, debajo de las ventanas, que solo las supera en un pequeño punto”. La idea es que dé profundidad.
El proyecto contaba también con la puesta en marcha de vitrinas mesa para la exposición de piezas arqueológicas y a ellas les han modificado la forma para restarles peso, mejorar anclajes, permitir una mejor circulación por la sala, pero sobre todo, permitir que puedan contemplar la exposición para una persona que necesite silla de ruedas y hacerlo accesible.
Piezas
Se podrán contemplar materiales de construcción de estas viviendas aparecidas a los pies de la Alcazaba como clavos, remaches, un trozo de llave, una cerradura, así como la reproducción de una puerta.
Habrá también un capitel, un fragmento de ventana o tinajas representaciones arquitectónicas. Los visitantes podrán ver cerámicas de iluminación o fuego como candiles con diferentes técnicas y anafres, o elementos de mesa como una vajilla jarritas con diferentes técnicas, formas abiertas para servir los alimentos.
A esto se suman juguetes o copias en miniatura de cosas que se usan como un servicio de mesa que no era algo que hasta ahora se hubiera visto en la arqueología medieval, igual que instrumentos musicales como una flauta o un tamborcillo. Además, se expondrán elementos de la vida cotidiana como botones, objetos metálicos, pinzas o espátulas.
El tesorillo
Quizá el elemento más interesante que allí se va a exponer es el denominado como ‘tesorillo’ que el Ayuntamiento de Almería tenía guardado en un banco, según explicaban el día que se presentaba el proyecto de musealización.
Se trata de una veintena de monedas de oro medieval que se podrá contemplar como un elemento más de este futuro museo.
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