Todo esfuerzo es baldío si no nos tomamos en serio el necesario aseo urbano de la capital, en su cada vez más amplia extensión. Es un problema de ciudad al que todos -ciudadanos, Ayuntamiento, empresas concesionarias, empleados y trabajadores, políticos de toda condición, gobernantes o en la oposición, y responsables técnicos de la elaboración o ejecución de planes y de transmitirlos a la sociedad con transparencia y efectividad, como actores más destacados- hemos de prestar la máxima atención y tratar de que la normativa existente se cumpla. Viene esto a cuento, otra vez en #BajoelManzanillo, porque el gran esfuerzo que despliega el Servicio Andaluz de Salud de la Junta de Andalucía para lograr un complejo hospitalario avanzado, moderno y acorde a los tiempos, en pleno barrio de Torrecárdenas, se ve ensombrecido por los auténticos estercoleros -lugares muy sucios- que podemos observar en los aledaños. Salen al paso de transeúntes y residentes, en una situación que se hace insostenible, porque ya aparecen hasta ratones, si bien, es verdad, que las colonias de gatos se encargan de que no campeen mucho. Los hemos visto el 19 de octubre de 2022 en la calle Hermanos Siret a unos metros de las viviendas allí existentes.
Un simple paseo, andando o en vehículo, por la avenida Torrecárdenas o la calle Hermanos Siret, hacen esquina, lindando con los aparcamientos y con algunos edificios del complejo hospitalario y diversos edificios que ya están habitados, nos da una idea de la dimensión de la suciedad almacenada entre maleza sin control alguno en la ladera del mismo cerro. Hay basura de cualquier tipo que pueda uno imaginarse, ya acumulada de hace tiempo, sobre todo objetos de plástico; residuos, prendas de vestir -hasta ropa interior-, edredones, colchonetas, mascarillas, vallas abandonadas, envases de cartón, etc. Tremendo.
Lo de la calle Hermanos Siret se agrava aún más porque a unos metros, solo cruzar la calzada, hay una serie de viviendas habitadas por numerosas familias que aparcan allí mismo sus coches. Al parecer, en la ladera del cerro del complejo hospitalario instalaron un día una zona ajardinada, pero el abandono ha dado lugar a que las plantaciones se sequen, algunas malvivan, y el sistema de riego esté destrozado y al descubierto. Si a eso le sumamos las basuras acumuladas, la situación es explosiva.
Si accedemos al complejo hospitalario desde la rotonda del Centro Comercial Torrecárdenas -otro basurero público- junto a la parada del autobús por la cuesta paralela a la calle Médico Francisco Pérez Company, la situación es similar, aunque los matorrales abundan más, muchos arrancados y apilados allí mismo. Hay insectos muy variados y hasta una auténtica plaga de saltamontes por zonas, entre los que hay que abrirse paso. Esa vía, en cuesta, está últimamente más transitada, ya que algunos profesionales sanitarios o visitantes a los hospitales o consultas utilizan el parking del centro comercial.
Hemos denunciado esta situación en numerosas ocasiones a través de las redes sociales con mensajes directos a los responsables de los servicios municipales, sobre todo en materia de limpieza y de jardinería. Por ejemplo, la última, en Facebook, el 30 de septiembre, escribíamos: «Una rotonda que es un estercolero, en el Centro Comercial Torrecárdenas. Bien hermosa, confluyen las calles Médico Francisco Pérez Company, Julio Visconti, y Erasmo de Rotterdam, en un lateral del Centro Comercial Torrecárdenas, próxima a la parada del autobús. Zona con abundante tráfico y bien concurrida por quienes usan el aparcamiento subterráneo y el transporte público. Esa rotonda, de grandes dimensiones, es un auténtico estercolero. Se acumula basura, plásticos, residuos, mezclados con matorrales…un abandono total, cuando la rotonda de más abajo, la que da a la avenida de la Constitución de Cádiz, sí está atendida y luce con dignidad. Una pena por el abandono y la dejadez que se observa. Es necesaria una limpieza a fondo y, posteriormente, darle un poco de vida con vegetación y algún mobiliario o detalle urbano. Merece la pena. Hace unos días, personal de ‘Almería limpia’ trabajaron en los alrededores, sin ni siquiera mirar a la rotonda«.
Ese día, 30 de septiembre, en la misma red social de Facebook, decíamos: «Matorrales arrancados y amontonados junto a basura, camino del Hospital Torrecárdenas. Entre el Centro Comercial Torrecárdenas y el Hospital -en paralelo a la calle Médico Francisco Pérez Company-, y en esta dirección, partiendo de la parada del autobús, asciende un camino bien asfaltado y acerado, en cuesta, que usan peatones, vehículos, y ahora parece que el transporte lanzadera entre el aparcamiento del centro comercial y el complejo sanitario. Ahí estaban trabajando, el 27 de septiembre, personal de ‘Almería Limpia’ con maquinaria. Arrancaban los matorrales y los arrinconaban junto al monte, al mismo borde de la acera, dejando la basura y los residuos también. Esperemos retiren una cosa y la otra, a no tardar mucho, si no lo han hecho ya, porque el aspecto es tercermundista. Así estaba la zona -ver imágenes-, coronada por una rotonda secarral, más próxima al hospital, donde confluyen las calles José Jiménez Lozano y Hermanos Siret, el 28 de septiembre de 2022, a las 10:30 h. Los comentarios son para todos los gustos«. La situación no solo sigue igual, sino que, lógicamente, ha empeorado. La única acera que tiene está siendo por tramos invadida por matojos y abundantes saltamontes que hay que ir salvando y abriéndose paso entre ellos. Un despropósito.
Bien es cierto, que en las últimas semanas se está observando una considerable presencia de empleados de la limpieza para actuar en los diferentes barrios -el 19 de octubre fuimos testigos de este aumento de personal en los barrios de Los Ángeles, San Félix, Barrio Alto, Santa Isabel, Villablanca, Torrecárdenas, Los Molinos, y Nueva Andalucía-. Pero es tanto lo que hay que limpiar que siguen siendo insuficientes. La muestra, la que comentamos y nos ocupa. Todos los aledaños del Hospital Universitario Torrecárdenas (HUT) y del Materno Infantil, así como del resto de edificios y servicios hospitalarios, sin olvidar el perímetro verde que se ha levantado, merecen una actuación puntual de limpieza y aseo. Hay previsto un nuevo edificio de consultas, mejora de aparcamientos, e, incluso, se habla de que podría ir allí la Facultad de Medicina. Todos esos alrededores están llamados a tener un gran protagonismo, tanto para el paso de personas, como para usos de quienes frecuenten los establecimientos existentes o que se instalen en el futuro. El tránsito peatonal se incrementará considerablemente. No podemos olvidar a los propios vecinos que llevan sufriendo mucho tiempo esta insoportable situación. Es imprescindible un plan urgente y contundente, y una organización eficaz para el adecuado mantenimiento de ese espacio urbano, donde se concentra el mayor complejo provincial de la sanidad almeriense, mereciendo un trato esmerado y exquisito.
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