“Estamos en un momento de analizar la salud mental y romper tabúes”

En a penas un mes, se ha alzado con el Premio de Booktrailers de su libro Septem otorgado por Planeta Gala (Fundación Antonio Gala) y con el Premio al Cortometraje “Voces” sobre salud mental en el Festival Impulsarte de Granada. Rocío Juárez posee una creatividad desbordante que le impulsa instintivamente a escribir guiones, libros, cortometrajes, ideas…Asidua a congresos sobre todo relacionados con el misterio, produce y realiza materiales sin cesar con recursos propios. Prolífica y generosa cediendo obras, así es esta almeriense.

¿En qué anda ahora metida?

(Risas) En mi segundo libro, que se me está demorando mucho en el tiempo. Saqué el primero en 2019, y la verdad es que no me quejo, va por la cuarta edición.

¿También es de misterio?

Sí, también. Tengo un guion hecho hace un tiempo y quiero llevarlo al libro. Es difícil pero quiero trasladarlo. Quiero añadir que aunque sea una novela siempre tiene algo de real, de alguna investigación que yo he hecho.

¿Hace investigaciones también?

Claro, me pongo buscar e investigar hechos reales, me reúno con gente para que me cuente cosas sobre ese hecho. Es pura curiosidad, luego no sé si lo trasladaré a guion, microrrelato…no sé.

Es escritora, guionista, realizadora, productora…¿qué faceta le define mejor?

Guionista. Me encanta crear historias, inventarlas, y el formato guion me tira muchísimo. Incluso a la hora de escribir novela también soy muy de estilo guion.

¿Cuándo comenzó con esa faceta?

Empecé en 2015-16 a dar cursos delante de la cámara, pero no es lo mío, me ha aportado mucho porque me ayuda a comprender qué siente un actor delante de la cámara, pero me di cuenta de que a mí lo que me gustaba era estar detrás de la cámara. A partir de ahí me seguí formando, para ir especializándome.

Su género preferido es el terror, ¿de dónde le viene?

El terror y el misterio. Desde que era pequeña. Yo coleccionaba las primeras revistas de Más Allá, también veía Informe Semanal que en aquella época me impresionaba mucho, hacían reportajes a veces sobre crímenes, recuerdo uno de un caso de una niña y un exorcismo que se me quedó grabado.

¿Es un buen momento ahora para el genero de terror?

Los 80 fueron grandiosos, pero creo que ahora se están rompiendo tabúes, se habla de otro tipo de cosas, del misterio desde otro punto de vista. Se está haciendo otro tipo de series y películas.

Quizás ahora nos asusta más la posibilidad de un tsunami que un zombie.

Sí, ese tipo de miedo o de susto hay que sustituirlo. Hay algo que ahora está en auge: el conocimiento de la mente del ser humano, de lo que una persona es capaz de hacer como en los psicothriller, mira el éxito de la serie sobre Jeffrey Dahmer. Antes veíamos cosas irreales como La matanza de Texas. En los 80 todo nos llamaba la atención y ahora es muy difícil sorprender a la gente, hay muchísima información.

Ahora vemos que el terror existe y está encerrado en una cárcel ahí al lado.

Nos llama la atención lo que el propio ser humano puede hacer y cómo la realidad supera la ficción. Siempre ha existido pero ahora sabemos que puede pasar y pasa. Ahora el ser humano está en ese momento de analizar la salud mental, de romper tabúes.

El último premio que ha recibido ha sido para un corto sobre salud mental .

Este en concreto era sobre el suicidio, y tenía ganas hacer algo así. Lo grabé en una casa abandonada de Rodalquilar. Se llevó el premio por la visualización elegante y necesaria a la hora de romper tabúes. Es difícil ver en un corto mío algo violento, explícito. Intento enfocar desde el punto e vista de la esperanza. Cedí ese premio en metálico al Teléfono de la esperanza.

Tiene muchos materiales que va guardando y si se presenta la oportunidad los presenta a concurso y también los cede para causas como la violencia de género.

Sí, es una necesidad, se me ocurren cosas y las tengo que hacer. Mi cabeza no para.

¿Hay algo que le obsesione últimamente?

Tengo varias obsesiones, pero una de ellas es hacer un proyecto bonito (se emociona). Todo lo que voy haciendo de salud mental, trata de personas, explotación, bullying… quisiera hacer algo continuo, todos los meses, con las temáticas, eso sería un sueño. Me inspira mucho cada vez que hay un día específico de algo.

Es su otra gran vocación, la sensibilización con las causas de ese tipo, que afectan directamente a las personas.

Sí. Es algo que tengo ahí siempre en la cabeza, y que me ilusiona tremendamente hacer, es algo primordial para mí.

¿Es perfeccionista trabajando?

Sí, es totalmente insoportable. Mucho. A veces me doy cuenta de que las cosas hay que hacerlas sencillas después de todo el recorrido que hago. Aunque a la hora de rodar ya voy con más tranquilidad, es más fácil, pero a veces no me soporto ni yo.