Nuevo revés al paciente con incontinencia tras ser operado de cáncer en 2019

Luis González, el paciente de 58 años que necesita con urgencia ser operado para poner solución a la incontinencia grave provocada por la operación de un cáncer de próstata a la que fue sometido en junio de 2019 y a los “dolores insoportables” que sufre desde hace años, no acaba de ver la luz al final del túnel. 

Esto es así puesto que fuentes del Hospital Torrecárdenas han informado de que ya no está en su lista de espera para ser operado, puesto que "en abril de 2022 solicitó voluntariamente el cambio de hospital al Regional de Málaga", previa firma y conformidad. Esto significaría que debería continuar en lista de espera, pero en el centro malagueño. 

“Estoy en Almería”

Sin embargo, el paciente, que trabaja en la agricultura en Roquetas de Mar, sigue convencido de que continúa en la lista de espera del hospital almeriense, en primer lugar porque asegura que el pasado diciembre acudió a este centro y le confirmaron que seguía siendo así.

González también niega que firmara ningún cambio de hospital: “Es cierto que en abril de 2022, una vez que en Torrecárdenas no me operaban – estaba en lista de espera en el centro almeriense  desde octubre de 2021- llamé a Salud Responde y me dijeron que podía ser atendido en el hospital de Málaga, y es cierto que fui allí, aunque no firmé nada, y me hicieron unas pruebas, pero a continuación me decían que no estaban haciendo la operación que necesito, por lo que a través de mi urólogo volví al Hospital Torrecárdenas”, manifiesta. 

Desde que fue operado del cáncer de próstata hace más de tres años y medio, Luis sufre una incontinencia grave y está a la espera de la implantación de un esfínter urinario artificial. Pierde más de dos litros y medio de orina cada día, lo que le obliga a llevar pañales de forma permanente.

Luis se lamenta de que cada día parece escribirse un nuevo capítulo de la odisea en la que se ve inmerso desde que fue operado del cáncer en el Hospital de Poniente, aunque solo tiene palabras de elogio para los médicos que le intervinieron, puesto que el tumor desapareció, aunque le dejó  graves secuelas. “Ya no sé a qué atenerme ni quién me podrá operar”, dice.

De momento y ante su desesperada situación, la Asociación Española Contra el Cáncer en Almería le ha ofrecido su ayuda. “Espero que puedan hacer al por mí, porque esto parece no tener fin”, concluye el paciente.