En 2007, con el MIR recién terminado y como flamante especialista, José Rubí aceptó la oferta para trabajar en el Hospital de Poniente, con la ilusión de crear allí un nuevo servicio de Neurología. Este jueves, 16 años después de aquel primer contrato, Rubí ha firmado por fin su plaza en propiedad en el ya Hospital Universitario ejidense.
Sin embargo, su ‘sueño’ de crear una unidad de Neurología aún no se ha hecho realidad, a pesar de que ésta es una especialidad troncal que atiende patologías tan graves y prevalentes como el ictus, que es la segunda causa global de mortalidad a nivel mundial -la primera para las mujeres- y que representa igualmente la primera causa de discapacidad grave en la edad adulta, además de ser la segunda causa de la demencia.
La inexistencia de este servicio en un hospital comarcal que atiende a una población de más de 250.000 personas es para José Rubí algo que todavía no alcanza a comprender en una administración sanitaria.
“¡Esto solo pasa en Andalucía, no en el resto de comunidades ni en ningún otro sitio del mundo. Es inconcebible y una anomalía del sistema que a día de hoy los hospitales comarcales andaluces no tengamos servicio de Neurología!" protesta”.
Anomalía Su propia situación personal estos 16 años puede definirse también como una anomalía del sistema sanitario, puesto que aunque es neurólogo y ha atendido a pacientes de esta especialidad en el hospital, está adscrito a medicina interna, al no estar la neurología entre su cartera de servicios.
Durante todos estos años, Rubí ha trabajado y luchado en la reivindicación de este servicio: “He participado en proyectos con la Consejería como la elaboración del Plan Andaluz de Ictus (con el PSOE) y siempre mi reivindicación ha sido la misma, que hay que dotar a los hospitales comarcales de neurólogos”.
Después de que el PP se sumara a esta reivindicación y le acompañara en sus exigencias, al igual que las sociedades andaluza y española de neurología, con la llegada al poder de Juan Manuel Moreno en 2019, entregó a la Delegación provincial de Salud un informe que justificaba la implantación del servicio, que puso en manos del delegado.
Por poco dinero
En él subrayaba que en realidad “por muy poco dinero se puede prestar un servicio médico fundamental para la ciudadanía”, que además evitaría largos desplazamientos de hasta más de 160 kilómetros, como ocurre con localidades del levante y el norte de la provincia, tratándose además en muchos casos de pacientes que tienen algún tipo de discapacidad, afectos de patologías como ictus, demencia, Párkinson o esclerosis múltiple.
Pero es que además, con la implantación de la neurología en los hospitales comarcales almerienses se conseguiría “reducir ampliamente la actuales listas de espera de muchos meses”, asegura.
“La lista de espera, por ejemplo, para la primera consulta en Almería tiene hoy un plazo medio de demora de un año”, advierte. “Esto mejoraría mucho simplemente con dotar al Poniente de seis neurólogos y al Hospital de La Inmaculada con tres”, asegura, mientras su informe duerme el sueño de los justos en un cajón de la Delegación de Salud.
“Ahora dicen que no hay médicos, pero estoy seguro de que si se crearan los servicios, en muy poco tiempo tendríamos los especialistas necesarios”, mantiene. Y pone el ejemplo de lo que ocurre en Lorca, una localidad de apenas 100.000 habitantes en cuyo hospital trabajan cinco neurólogos en su servicio. Es más, llega a decir que tiene constancia de neurólogos que han dejado Andalucía por falta de trabajo.
Y es que a la falta de servicios en los hospitales comarcales, se une la escasez de neurólogos en Almería. Actualmente los que están en plantilla del SAS son 20, 19 en Torrecárdenas, único hospital público con esta unidad, y él mismo en el Poniente.
“En la provincia harían falta como mínimo 15 especialistas más para cubrir las ratios recomendadas por las sociedades científicas, que son de cinco neurólogos por cada 100.000 habitantes. La ratio de Almería es del 2,5”, alerta, y en el Poniente es inferior al 1%.
Respuesta de Góngora En su portal de facebook, además de congratularse por su plaza, Rubí no podía evitar volver a plantear esta reclamación: “Los 250000 habitantes del Área Sanitaria Poniente no son ciudadanos de segunda. A ver si ahora que estamos en plena campaña electoral la administración local y autonómica nos escucha y adquiere el compromiso. Espero que no pasen otros 16 años más para que esto sea una realidad”, decía.
De momento, su mensaje ya ha recibido respuesta de Francisco Góngora, alcalde de El Ejido: “En eso estamos, Pepe. Ese y otros nuevos servicios para el Hospital. Las inversiones están llegando, y tienen que llegar también más servicios”.
Sin embargo, por ahora sus reivindicaciones no han sido contestadas por otros responsables políticos.
Otra prueba del sinsentido de esta realidad andaluza en la que muchos vecinos tienen que desplazarse decenas de kilómetros para ser atendidos por un especialista, la aporta la propia actividad profesional privada de José Rubí: “Mi consulta está desbordada”, afirma.
Roquetero y formado en Torrecárdenas
José Rubí Callejón nació en 1978 en Roquetas de Mar y estudió la carrera de Medicina en la Facultad de Granada (1996-2002). Como neurólogo hizo el MIR en el Hospital Universitario Torrecárdenas, entre los años 2003-2007, obteniendo el premio de “Residente Excelente”. El hospital de referencia de la provincia le hizo un contrato de un año, pero a continuación le ofrecieron trasladarse al de Poniente y aceptó, como ya se ha mencionado antes con la intención de crear en él un servicio de neurología del que aún carece, a la espera de que los responsables políticos apuesten por él.
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