La enfermera almeriense que la pasada semana denunció haber sido besada sin su consentimiento por parte de un compañero de profesión en el transcurso de unas jornadas, visitó el viernes el programa 'Y ahora Sonsoles' de Antena 3 para exponer su caso. "No fue un pico, me babeó toda la boca", recoge la web del magacín que conduce Sonsoles Ónega.
Todo comenzó el 18 de septiembre durante el descanso para el café en el marco de unas jornadas informativas. La mujer, que conocía al acusado con anterioridad por su profesión, le habría manifestado "de broma" en ese momento que se alejase por si pudiera estar contagiado de covid.
Fue entonces cuando, conforme a la versión de la afectada, el hombre la habría cogido "fuertemente" de la cara y el cuello para acercarle su rostro y besarla "en contra de su voluntad" en la boca; una situación ante la que "no supo reaccionar" y de la que hubo varios testigos. Asimismo, manifestó dolencias en el cuello tras este acercamiento, recogió Europa Press.
En su testimonio en televisión, la enfermera afirma que sus compañeros se quedaron "espantados" y "pasmados" ante la escena.
"Ya no fue solo el asco, también la humillación. Yo pensé en lo que pensaría toda la gente que estaba mirando, qué pensarían de mí. Fue muy asqueroso, me dio mucho asco", relató la almeriense en Antena 3.
Según su testimonio, no es la primera vez que el hombre la trató de manera vejatoria. "Yo no admito según qué tipo de bromas y él ha tenido comentarios que no me han agradado. Como: "Ahí viene la 'Dolce & Gabanna', qué modelito traes hoy". O que en una comida me preguntara que si me había separado de mi marido para vivir la vida", expuso en el plató de 'Y ahora Sonsoles'.
La enfermera dijo también sentirse arropada por sus jefes, aunque se lamentó de que otros compañeros están "más preocupados" por lo que le va a pasar al hombre que la besó que por ella.
El programa también se hizo eco del mensaje de una compañera de ambos enfermeros que asegura que el beso existió, pero que no hay acoso, ni le metió la lengua, y que el hombre está muy arrepentido. "La que sabe si la lengua entró o no, y si le salivajeó la boca, soy yo", apostilló la enfermera.
La pasada semana, la consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López, señaló que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) cuenta con servicios de asesoramiento a disposición de la enfermera. Mientras, un juez de instrucción ha impuesto al hombre una medida cautelar de 200 metros de alejamiento e incomunicación con su compañera de profesión.
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