A juicio por tener munición de guerra y estimulantes sexuales “clandestinos”

El día 10 de marzo de 2019, la barriada de La Muleria, en Cuevas del Almanzora, era testigo de una serie de registros policiales en el domicilio de E.C.S. los cuales concluyeron con la incautación de un depósito de munición de guerra y medicamentos no autorizados. Ahora, el procesado se enfrenta a una pena de 15 años por los diferentes cargos que se le imputan. 

Al entrar las autoridades la Policía Judicial en el inmueble encontraron 69 proyectiles de cartucho catalogados como munición de guerra, cuya tenencia por un particular está prohibida por la ley. Asimismo, durante el registro también se encontraría un total de 2.471 proyectiles de diferentes características, pertenecientes a 9mm Parabellum, 357 Magnum y rifle y 3.213 gramos de pólvora y una pluralidad de casquillos, además de una veintena de cartuchos de arma corta.

A consecuencia de esta operación, el Ministerio Fiscal ha solicitado esta mañana en la Sección 3 de la Audiencia Provincial una pena de 6 años de prisión para E.C.S. por incurrir en un delito de “depósito de munición de guerra”, y otros 3 años por un delito de "depósito de munición de armas reglamentadas”. Estas peticiones han sido elevadas durante la vista oral celebrada en el Palacio de Justicia.

Medicamentos para la estimulación sexual
Asimismo, el Ministerio Fiscal también ha solicitado una pena de 2 años de prisión por un “delito contra la salud pública”. Y es que, durante la intervención realizada el pasado 10 de marzo de 2019, también se encontró en el inmueble del acusado básculas de precisión y bolsas para el envases de sustancias, además de una agenda con anotaciones donde se registraban personas, cantidades y dinero.

Algo que puso sobre la pista a las autoridades policiales que acabaron encontrando en el domicilio ampollas de Sustanon, un medicamento que tiene como principio activo la testosterona, 400 pastillas de la hormona sexual anabolizante, Metanolol, además de otras pastillas indicadas para restaurar la función eréctil. Según exponía durante la vista el Ministerio Fiscal, estos fármacos al no estar autorizados en España, su comercialización en el país sería “clandestina”. La fiscalía ha indicado que E.C.S. poseía estos medicamentos para “su suministro a terceras personas” en diferentes eventos como fiestas que “éste organizase”.

Durante la vista oral se han presentado como pruebas en el Palacio de Justicia un informe desarrollado por el Departamento de Balística del Laboratorio de Criminalística de Valencia para ratificar la catalogación de las municiones intervenidas, y un informe pericial elaborado por el Servicio de Área de Medicamentos Ilegales que ha ratificado la índole de los medicamentos intervenidos.

Puerta oculta a una dimensión psicotrópica
En última instancia, la acusación ha relatado durante el juicio que, en otro registro realizado en la Plaza de Los Conteros, Nº67, también en Cuevas del Almanzora, "las autoridades encontraron que un habitáculo existía una compuerta de hierro reforzada entre la cocina y otras habitaciones, sólo accesible mediante el uso de una llave oculta en un falso enchufe eléctrico".

Al acceder al interior la Policía Judicial hallaría 1,340 gramos de sustancia vegetal con el 12,70% de THC, así como 12,7 gramos en polvo con casi un 20% del mismo compuesto psicoactivo. Durante este registro también se hallaron otros estupefacientes como 239 comprimidos de MDMA repartidos en diferentes niveles de pureza, valorados en 11.347 euros, así como comprimidos de Loracepán, hechos por los que el Ministerio Fiscal pide 4 años de prisión para el acusado por “un delito contra la salud pública por tráfico de drogas de las que causan grave daño a la salud pública”.