Torreón de San Miguel: concesión en seis meses y obras en este año

El Torreón de San Miguel se acerca a la tan esperada rehabilitación y puesta en uso como punto de atención turística en el Parque Natural de Cabo de Gata. Se acerca gracias a que la Delegación de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul ha sacado a información pública la concesión administrativa para la ocupación del domino público marítimo-terrestre para la rehabilitación de este espacio.

Se trata del proceso en el que se puede contemplar el proyecto final que pretende desarrollar el Ayuntamiento de Almería sobre este inmueble y se podrán presentar alegaciones hasta el próximo 7 de febrero.

Explicaba el delegado de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Manuel de la Torre, que a la par que han sacado este periodo de exposición pública se han solicitados los informes sectoriales pertinentes al Servicio Provincial de Costas, a la Delegación de Cultura, Capitanía Marítima, Puertos del Estado, Ministerio de Defensa, y a la propia Junta Rectora del Parque Natural.

Según De la Torre “técnicamente no hay ningún problema para la cesión y somos optimistas para que en unos seis meses la Dirección General de Sostenibilidad pueda realizar la concesión”, un uso cuya duración determinará también la Dirección General pero que el Ayuntamiento ha solicitado por un plazo de 50 años.

Por su parte el concejal de Promoción de la Ciudad, Joaquín Pérez de la Blanca, tiene claro que será este año 2024 cuando puedan comenzar las obras de rehabilitación del Torreón de San Miguel. Unos trabajos que “tras las últimas modificaciones que se han realizado a petición de los técnicos de Medio Ambiente, se ha presupuestado en 377.915 euros” que salen directamente desde los fondos del Plan Turístico de Grandes Ciudades.

Modificaciones
Sobre los cambios que se han realizado sobre el proyecto original diseñado por el Estudio Cano Lasso, ganadores de un concurso de ideas en el año 2018, explica el concejal de Promoción de la Ciudad que han sido leves pero vinculados a “ocupar menos espacio visual de la costa, intentar dejar el entorno de la torre lo más limpio posible” y recuerda que lo más importante “es la actuación dentro del torreón, cuya rehabilitación es muy necesaria” y su puesta en uso como punto de información turística.

¿Pero qué se va a hacer? Según consta en la memoria del proyecto que está en exposición pública podemos ver que la rehabilitación estará guiada “por el criterio de mínima actuación, realizando sólo aquellas operaciones necesarias para garantizar su conservación”.

En el exterior, se va a demoler el muro perimetral que data del año 1986 pero sí que se protege la entrada con “una pasarela de tablones de madera de pino Flandes” cosida con cuerda de nylon que “conectará la torre, la oficina y los cuartos de baño que estarán fuera con el aparcamiento disuasorio situado en el acceso a la playa”. 

Cabe recordar que en el interior la planta baja será la zona que se destinará a punto de información turística contando con una proyección circular y envolvente de las maravillas naturales de su entorno, la planta alta queda disponible para usos culturales y expositivos. La cubierta se destinará a mirador.