Pasan tres semanas del trágico incidente sucedido en Barbate, en donde dos agentes de la Guardia Civil perdían la vida al tratar de interceptar una narcolancha. Este suceso, sumado a otros como la localización de una decena de estas embarcaciones fondeando a placer en la bahía de Los Genoveses ha puesto en el foco mediático una problemática que desde las asociaciones profesionales de la Benemérita se viene denunciando: la falta de medios, profesionales y materiales para hacer frente a un modelo delictivo desarrollado en alta mar, cada vez más profesionalizado, y que ha hecho del narcotráfico, el transporte ilegal de personas y la logística su medio de actuación.
“Estamos desbordados, tuvieron que venir efectivos de Granada para apoyarnos en el operativo”, relataba Víctor Vega, portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Almería en una entrevista concedida en enero. Hoy día, al recordar aquella intervención realizada en la costa abderitana, donde falleció un inmigrante al llegar a la orilla y el oleaje complicó el desembarco de pasajeros de la patera, así como la intervención de las fuerzas de seguridad del Estado, Vega, aunque consciente de que las actuaciones de la Guardia Civil en otros territorios españoles por demarcación del Estado es un procedimiento natural, lamenta en cierto modo la intervención de sus compañeros del puerto de Albuñol. “Que viniera una patrulla del puerto de Albuñol es sintomático de que no hay personal suficiente”.
Inversiones millonarias y falta de medios
La falta de medios tanto personales como materiales fue una de las preguntas que tuvo que contestar el pasado martes el ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska durante la sesión plenaria del Senado.
El responsable de la cartera del Interior señala que “se ha realizado una inversión de 80 millones de euros en medios materiales y personales”, además de estar previsto “37 millones más”. De la misma manera, Marlaska también expresó en la sede senatorial que desde “el primer día” que llegó al cargo, reforzó los medios y plantillas del Campo de Gibraltar e indicó que durante el gobierno popular se perdieron 1.700 efectivos en esta zona. “Nosotros hemos recuperado más de 3.600”. Sentenciaba el ministro.
Sin embargo, para algunos, en lo que respecto a Almería, esas inversiones parecen llegar con cuenta gotas o simplemente no se ve la relevancia de la provincia para las mafias a la hora de operar. En este sentido, asociaciones profesionales de la Guardia Civil en la provincia se cuestionan por qué el Instituto Armado en Almería no dispone de un helicóptero propio con el cual poder hacer operaciones aéreas. Teniendo que depender del apoyo de otras bases como Murcia.
A tenor de las declaraciones del delegado del Gobierno en Andalucía Pedro Fernández, sobre el episodio de las narcolanchas de Los Genoveses, donde se decidió no actuar para “no poder las vidas de los agentes en riesgo” debido a la mala mar. Asociaciones de guardias civiles en Almería se han echando las manos a la cabeza, tachando esas declaraciones de ‘perogrullada’, “tiene que ser obvio y fundamental no poner vidas en riesgo”, explican.
Asimismo, sostienen que el hecho de que las mafias utilicen la bahía del Cabo de Gata es un aspecto muy negativo para Almería. “Nos dicen que están presionando, quizás en Adra. Se van de allí y aparecen en esta zona. Ellos saben que son zonas de embarcaciones de recreo, y aquí están tranquilos. Pero eso no se puede permitir, y para combatirlo hacen falta más medios”.
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