José Ángel Pérez, la radio se hizo carne

Antonio Sánchez Jiménez-Pajarero armó la revolución y puso a Radiocadena Almería en todo lo alto. Metió la pala a lo establecido y tiró de los mejores profesionales para competir con Antena 3, que de la mano de Enrique Martínez Leyva, se había colocado al frente de la clasificación. José Ángel Pérez ya era una estrella de la radio en Almería cuando le sentaron a hacer deporte. No era un espacio más sino un maratón de radio en directo que fue bautizado como ‘Radiodeporte fin de semana’ y el sello: ¡¡A cara descubierta!! Los sábados y domingos a toda página anunciando el programa en LA VOZ de Almería. En aquel tiempo con el Polideportivo Almería de Pepe Meca liderando el deporte, era toda una aventura tantas horas en antena, pero nada podía con un José Ángel Pérez que daba un plus al espacio y a las retransmisiones en directo con conexiones por todos los campos de la provincia.

Frescura

En aquel viejo  patio de Radio Juventud de Almería nos conocimos un día y al siguiente los dos en antena. Transmitía muchas ganas de trabajar y viniendo de hacer la ‘Radio en la Calle’ con su alma gemela, Juan Torrijos, aquello tenía que salir bien.  Le daba vida a la retransmisión del partido y animaba como nadie haciendo la publicidad en directo, y matizando cada detalle del juego sin estar viendo el partido. Luego, sacaba punta a los entrenadores en la rueda de prensa, y los protagonistas llegaban desde el interior del vestuario porque: el cable daba para ello y era la novedad. Al estudio se llevaba a entrenadores y enriquecía aquella radio, hasta el punto de pasar las horas, casi seis de golpe, con la afición enganchada al Almería. 

Novedad

Lo puso todo patas arriba como le había pedido su director y acababa agotado del estrés de la radio. Tenía el tiempo justo para echar un café en ‘El Paso’ (por la conexión nacional) y todo lo demás era dejarse la garganta en antena con Antonio Sánchez Junior y Antonio Cortés en la técnica. Ellos si que eran artistas para dar forma a toda la radio que José Ángel llevaba dentro. No se mordía la lengua y hacía honor al programa que realizaba, y su cara al descubierto para exponer con claridad todo lo que estaba pasando en el deporte de Almería. Con José Ángel salimos de la cabina de retransmisiones para ponernos a pie de campo, y se metieron los micrófonos en los vestuarios pese a la mala cara de Juan Antonio Román, José Víctor y el presidente Pepe Meca. Cuando los demás habían terminado su programa empezaba lo bueno en Radiocadena y los aficionados se enchufaban a la radio, y hasta las diez de la noche, llegaba lo mejor de cada domingo. Siempre decía tras un buen programa: “Esto ya no vale señores y mañana hay que dar la talla. Esto es aire”.

Rigor

Muchos tildaban a José Ángel de ir muy rápido y de no saber “ni papa” de deporte: y se equivocaban. Era puro rigor informativo y todo lo aprendido en su carrera lo trasladó al deporte y le salió perfecto. En los desplazamientos del Almería sentados a la mesa con los jugadores se hacían las mejores entrevistas, y siempre transmitiendo sensaciones porque la radio de José Ángel era pura pasión. Lo mejor de todo es que empezó a gustarle al segundo o tercer domingo, y aquello duró años, cambiando para siempre la forma de hacer la radio en Almería: porque los partidos se vivían una hora antes y hasta tres después, no dejando nada al azar y puliendo cada detalle. Los periódicos de Almería estaban siempre con un redactor enganchado a la radio mientras el de Radiocadena desde una gasolinera o en un restaurante hacía el milagro de la radio. El piloto rojo era sagrado para José Ángel.

Prestigio

El que fuera vocalista de tantos grupos musicales y, hermano del mítico Juanjo, explotó en el deporte y sin tener datos sobre si iba primero Antena 3 o Radiocandena, acabado cada programa salía corriendo para casa porque el lunes a las 9 estaba al pie del cañón, haciendo otro programa y siempre con la radio que llevaba en las venas y le salía a borbotones. Rendía cuentas al director, ‘El Pajarero’, para ir puliendo un programa que iba a más y se metían en antena llamadas de aficionados en ese ir a tumba abierta que tanto le gustaba a un ‘animal’ de la radio, que se ponía delante del micrófono y encontraba la felicidad. Transmitía cercanía. Exigía más que ‘El Pajarero’ a la hora de trabajar. Luego hizo sucesos y el ‘Todo Noticias’ pero nada le hizo más feliz que nuestra radio.

En José Ángel Pérez la radio se hizo carne.