Cuando el 7 de septiembre de 2023 a Jesús Vicente Alcaraz y a un grupo de miembros de las Fuerzas Armadas y de los Cuerpos de Seguridad del Estado se les ocurrió crear una hermandad que pusiera en valor su oficio no sabían cómo de rápido crecería aquello. Más de un año después, la asociación se ha extendido ya a 11 comunidades autónomas y en algunas de ellas, como Andalucía, en más de una provincia. A pesar de ser de ámbito nacional, su sede se encuentra en la calle Murciel, número 10, en El Ejido.
La Hermandad Humanitaria por la Defensa y Seguridad surgió de la necesidad de recuperar el prestigio de la Policía, la Guardia Civil y de la Armada, unos cuerpos que, en muchos casos, han perdido la confianza que en otros tiempos le profesaba la población: "La Policía a veces tiene mala fama porque lo que ven los ciudadanos es que lo único que hacen es, por ejemplo, poner multas. Nuestra idea era visibilizar y promover el importante trabajo de protección y servicio a la comunidad que realizan los distintos cuerpos", explica Alcaraz, presidente de la Hermandad.
El almeriense, antiguo policía local, jubilado el pasado agosto, está satisfecho del gran crecimiento experimentado: "Cada vez somos más asociados y ni siquiera hace falta que pertenezcan a las Fuerzas Armadas o a los Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado". Este es el caso, de hecho, de Luis Cara, vicepresidente de la Hermandad, quien reconoce que su aspiración es llevar el proyecto "a todas las provincias españolas".
Orgullosos de su independencia económica y de su carácter apolítico, sus trabajos y colaboraciones han trascendido el ámbito de la defensa y la seguridad para abordar, como su propio nombre indica, asuntos de carácter humanitario. Así, la sociedad los ha acogido con los brazos abiertos y una gran sonrisa en los labios.
La cara humana
Ante la oportunidad de colaborar con actividades socio-humanitarias, la Hermandad no pudo negarse: "Nos gustaba mucho la idea, pero siempre hemos tratado de llevarlas a cabo con asociaciones afines a nosotros, como, por ejemplo, con los Retirados Asociados de la Guardia Civil de España (RAGCE) o con la Asociación de Jubilados de la Policía Nacional (AJPNE)", explica. De esta forma, añade, la donación de juguetes o de hortalizas se vincula a la imagen de estos cuerpos.
La acogida por parte de la población ha sido un impulsor importante en su actividad: "No hay mes o semana que no tengamos planeado algo, si no es en una provincia es en otra", reconocen. De esta forma, las asociaciones siempre suelen estar dispuestas a recibir su ayuda y colaboración. Desde el reparto de ropa, juguetes o verduras a aquellos que lo necesitan -como en el Hospital Materno Infantil de Málaga o Caritas Castrense- hasta jornadas de convivencia con los colombianos de España, su ámbito de actuación es tan amplio como agradecido.
Tanto Alcaraz como Cara subrayan la formación que la Hermandad llevó a cabo en el Acebuche para facilitar la reinserción social de los presos: "En algún momento tendrán que salir del centro y si se les ayuda a integrarse una vez sean libres el beneficio repercutirá en ellos y en la sociedad en su conjunto", explica el presidente, quien afirma que también intentan "dirigirse a los poderes públicos en nombre de los ciudadanos".
Recuerdan con especial cariño la donación de 5.000 kilos de hortalizas que realizaron en la Ciudad de los Niños de Málaga. "Ahí acogen a los niños que son huérfanos o que han sufrido malos tratos, que tienen problemas de acogida... Poder ayudarlos de manera desinteresada y que luego se te acerquen a dar las gracias te rompe un poco el corazón", admite Cara.
Defensa y Seguridad, en primer plano
No olvidan, sin embargo, su principal objetivo: "Realzar la figura de los cuerpos de seguridad del Estado; realizar actividades en el servicio público del ciudadano; y reivindicar, recoger y promover actuaciones con dicho fin", cuentan. En esta línea, recuerdan la celebración del congreso 'Hablan los héroes olvidados', unas jornadas para recordar a las víctimas del terrorismo en el que las víctimas y familiares narraron en primera personas sus vivencias y sus sentimientos al respecto tanto tiempo después: "Es verdad que hubo víctimas de todo tipo, pero la gran mayoría fueron de los cuerpos de seguridad", afirma Alcaraz.
Su proyección también alcanza al próximo año: "Tenemos programada una charla sobre la mujer en las Fuerzas Armadas. Queremos organizar dos mesas redondas: una que vaya desde la década de los 80 hasta nuestros días y otra que hable del presente y del futuro", anuncian. Y no solo eso: "También hemos planificado una serie de charlas sobre seguridad vial en los institutos, pero lo vamos a hacer de forma distinta a la Policía Local: vamos a traer a personas que hayan sufrido accidentes de circulación con secuelas. Solo así podremos impactar lo suficiente a los niños como para sensibilizarlos", señala el presidente.
Mientras narran los proyectos de la Hermandad, sus mentes entran en ebullición. Un brillo en sus miradas revela la ilusión y el esfuerzo que han puesto en sacar adelante esta idea de origen almeriense. El tiempo dirá si logran sus objetivos, pero una cosa está clara: "Tenemos muchísimas ganas", confirman ambos.
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