La calle que saltó el cauce de la Rambla

La calle de Paco Aquino tuvo su origen en la de Santos Zárate a la que le quitó el nombre

La calle de Paco Aquino cuando el coche de Franco pasó por allí de regreso del aeropuerto, en 1968. Todavía estaba llena de solares sin edificar.
La calle de Paco Aquino cuando el coche de Franco pasó por allí de regreso del aeropuerto, en 1968. Todavía estaba llena de solares sin edificar. Eduardo de Vicente
Eduardo de Vicente
18:28 • 15 oct. 2024

Pertenezco a esa última generación que entendió la Rambla como una frontera que separaba la ciudad de las afueras. Cruzar el cauce y seguir adelante era para nosotros una aventura como si estuviéramos metidos en un viaje. Cuando íbamos en coche por la Carretera de Ronda descubríamos unos barrios que nos eran ajenos, una ciudad que no nos pertenecía porque nunca la habíamos pisado y porque en nuestro pequeño mapa sentimental aquellos escenarios más allá de la Rambla ya no eran Almería.



La calle de Paco Aquino formaba parte de aquellos barrios modernos que echaron raíces sobre los antiguos terrenos de la vega que lindaban con el cauce, en las afueras de la ciudad. Su origen se remonta al verano de 1931, cuando en uno de los Plenos del mes de julio, las autoridades republicanas decidieron que la calle del Obispo Santos Zárate dejara de rendirle homenaje al prelado y pasara a denominarse calle del Poeta Paco Aquino, al que la ciudad le debía un gesto. Francisco Aquino Cabrera, que había fallecido en 1910, había sido un personaje muy querido en esta tierra por sus escritos y especialmente por su fama como poeta. 



La República quiso honrar su memoria dejando a Santos Zarate sin calle y dándosela al poeta, un cambalache que sería corregido años después cuando en 1939, ya en tiempos de la dictadura, el obispo recuperó su ‘cetro’ callejero y a Paco Aquino le concedieron la nueva calle que empezaba a nacer al otro lado de la Rambla, que con la construcción del puente conocido popularmente como ‘del 18 de Julio’, se convertiría años después en una auténtica avenida.



Fue en los primeros años de la posguerra, allá por 1942, cuando la calle de Paco Aquino vio nacer un proyecto que quería prolongarla hasta la Carretera de Ronda. Hasta ese momento la calle empezaba en la esquina con la Rambla y terminaba a la altura de lo que hoy es la calle de Altamira. De allí al Camino de Ronda se sucedían los vestigios de la antigua vega. 



El Ayuntamiento quería que la prolongación de Paco Aquino sirviera para establecer una nueva entrada a la ciudad, una puerta abierta de par en par por la que pudieran penetrar a diario todos los productos que venían de la vega al Mercado Central, esa caravana de carros que antes de que amaneciera conquistaban el centro de Almería con las verduras recién cogidas. Para ello era necesario que el Camino de Ronda y la calle de Paco Aquino se comunicaran, ya que estaban separadas por la tapia de una de las fincas que rodeaban la manzana. El proyecto de prolongación de Paco Aquino hasta la carretera se fue atrasando por falta de liquidez hasta que en 1950 volvió a retomarse. El primer paso fue negociar con los propietarios de los terrenos, en este caso con las propietarias, las señoras Carmen González Montoya y Carmen Bretones Ruano, que eran las dueñas de seis mil y tres mil metros cuadrados de tierra, respectivamente, en las dos parcelas que iban desde la esquina de la calle de Altamira hasta el Camino de Ronda.



Fue en esa década de los 50 cuando llegó el despegue de la calle de Paco Aquino, culminado con las 80 viviendas sociales que levantó allí la Obra Sindical del Hogar. A medida que fueron llegando nuevas familias, la calle se fue urbanizando. En 1958 se instaló en ella y en el puente de la Rambla el alumbrado público moderno a base de lámparas de vapor de mercurio con color corregido, sostenidas sobre columnas. 



El proceso de crecimiento de la calle no paró hasta los años 70, cuando se construyeron nuevos edificios en los últimos solares que quedaban libres sobre los viejos huertos en retirada. La calle de Paco Aquino se convirtió así en esa avenida por donde entraban los productos de la vega a diario y por donde en febrero del año 1968 cruzó el coche y la comitiva del Caudillo Franco cuando venía a la ciudad después de haber inaugurado el aeropuerto.




Temas relacionados

para ti

en destaque