La mayoría de los niños almerienses desconocen cómo es viajar en tren

Maquetas con trenes circulando por sus vías, antiguos uniformes del personal de RENFE, equipajes, ferrocarriles en miniatura y un sinfín de objetos y documentos que recuerdan la historia del transporte sobre raíles en general y la de Almería en particular: esta es la promesa que cumple con rotundo éxito la sede-museo de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Almería (ASAFAL). Se trata de un espacio ubicado en la calle Tauro de la capital en el que, con gran ilusión y cariño, se ha conformado una exposición. Es dicha exposición la que cada lunes de 2024 (y hasta diciembre) se enseña a los alumnos de tercero de los colegios almerienses. ¿El objetivo? Acercar a los más pequeños a un transporte que muchos aún no conocen.

Una realidad inexplorada

Desde el pasado 14 de octubre -con la visita del primer grupo del colegio Compañía de María- hasta diciembre también pasarán por la sede-museo el colegio Freinet, el Mar Mediterráneo y el Rafael Alberti. Todos ellos traerán niños que varían entre los 8 y los 9 años con un objetivo en común: "Acercar a los escolares el mundo del tren para que sepan de su existencia y sean también reivindicativos desde pequeños", señala Pedro Mena, portavoz de ASAFAL.

Este fin se explica por una realidad que golpea a la infancia almeriense: muchos niños no conocen la experiencia de viajar en tren debido a lo mal comunicada que está la provincia. Es el caso de María, una niña que no deja de sorprenderse por lo que está viendo en la exposición y que asegura que le encantaría viajar en tren porque nunca lo ha hecho.

Va acompañada de Carmen, Lucía y Daniela, quienes aunque sí han probado a viajar en ferrocarril en alguna otra ciudad, admiten que les gustaría que Almería contase con tren para ir a Roquetas de Mar o a Aguamarga. Es así, inocentemente, como ponen sobre la mesa sin saberlo la idea de un cercanías almeriense. En contraste, una de ellas revela con ilusión que le gustaría que hubiera un tren que la llevase "a otro país".

Aquellos que han tenido la suerte de viajar sobre raíles lo han hecho en otras provincias españolas o, incluso, en otras ciudades europeas. Francisco y Alejandro son ejemplo de ello, puesto que han probado antes el metro de Madrid y de Londres que el tren de Almería. "Yo viajé en el tren a vapor de Harry Potter y me encantó", recuerda uno de los niños con añoranza.

Una visita de lo más completa

Todos ellos aseguran haber disfrutado la visita, en la que un 'jefe de estación' ataviado con una gorra de maquinista les ha explicado el funcionamiento tanto de los trayectos en tren como de algunos artilugios que los niños nunca han llegado a conocer, como el momento de picar un billete en físico o cómo se realiza una llamada a través de un teléfono de disco de marcación rotativa.

La ilusión de los pequeños se ha desbordado en el momento en el que se han encendido las diferentes maquetas presentes en el museo, sobre las que trenes en miniatura de muchos tipos han comenzado a correr sobre los raíles. Desde algunos clásicos como el Talgo 3 hasta otros ejemplares históricos como el Orient Express, el Trifásico o el Estrella Alcazaba, todos han sido señalados y explicados a los alumnos durante la exhibición.

Finalmente, los estudiantes han sido trasladados a la zona de archivo y biblioteca para realizar de la mano de Peque Talleres Almería una serie de actividades para afianzar los conocimientos y aprender a gestionar las emociones. Una monitora los ha acompañado primero durante un cuentacuentos con marionetas y después en un taller de colorear, para terminar echándoles fotos en un photocall gigante en forma de tren.

Para aquellos adultos y adolescentes que quieran visitar el espacio museístico, Pedro Mena recuerda que la sede abre todos los viernes desde las 18.00 hasta las 20.00 horas y que la visita, que contará con una muestra del funcionamiento de las maquetas, es totalmente gratuita. Además, el próximo 30 de noviembre ASAFAL ha programado una jornada de puertas abiertas.

Metas futuras

Que haya generaciones venideras que continúen la obra de la asociación es importante para Mena. Es por esto por lo que considera vital enseñar a los niños qué es lo que Almería se está perdiendo. "Nuestro primer objetivo es que el AVE llegue a la provincia. Cuando esto ocurra, nos gustaría convertir la estación histórica de la capital en un centro de interpretación ferroviaria. Es el lugar idóneo, tan bonito y tan cerca de los propios trenes... Pero sabemos que faltan años para eso. Tampoco nos parecería mal trasladar el museo al propio entorno de la estación, como a una nave de locomotoras", reconoce.

La Asociación de Amigos del Ferrocarril de Almería se originó el 25 de enero de 1998. Comenzó sus andaduras en un vagón de ferrocarril, para trasladarse mas tarde a la casa del capataz de la estación de Huércal de Almería. Cada vez más cerca de su objetivo, hoy han logrado que el Ayuntamiento les ceda un local en la ciudad de Almería, en la calle Tauro, un lugar que aún se encuentra lejos de su aspiración final.