Momentos de terror se vivieron la mañana del pasado jueves 17 de octubre en la Avenida Federico García Lorca de Almería, cuando un coche a gran velocidad irrumpió en la acera, sembrando el pánico entre los peatones. El incidente ocurrió alrededor de las 10.45 horas en el tramo ascendente entre las calles Hermanos Machado y los Picos, justo frente a una concurrida zona comercial y de restauración.
Según testigos presenciales, el vehículo, un Renault pequeño de color rojo, irrumpió por la acera a la altura del Carrefour Express y continuó su trayectoria junto a las fachadas de varios establecimientos, entre ellos el Burger King y la cafetería Ysla, donde muchas personas se encontraban desayunando en ese momento.
"Nos quedamos en shock, tanto las mesas que estaban en las terrazas como las personas que caminaban por la acera", relata a La Voz un trabajador de la cafetería Ysla. "No sé cómo no se llevó a nadie por delante", añade, aún sorprendido por la velocidad a la que circulaba el coche, que apenas tenía espacio para maniobrar entre la terraza y la fachada del local.
El empleado también destacó que su rápida reacción evitó un posible atropello, al advertir a varios clientes que estaban a punto de salir de la cafetería justo cuando el coche se aproximaba. "Les grité rápidamente para que no saliesen, porque el coche los hubiera atropellado", relató.
El vehículo, ocupado por dos jóvenes según el empleado, desapareció de la escena tras reincorporarse a la calzada en la calle de los Picos. El hecho de que no hubiera heridos ha sido calificado por muchos como milagroso, ya que en el momento del incidente, varias decenas de personas transitaban por la acera, incluyendo a una mujer con muletas, que apenas pudo esquivar el paso del coche.
Por su parte, fuentes del Ayuntamiento de Almería han confirmado a este medio que el coche ha sido identificado por la Policía Local, y los hechos ya han sido trasladados a la autoridad judicial competente para su investigación. Por su parte, los testigos aportaron tanto la matrícula del vehículo como detalles de los ocupantes. Además, varias cámaras de seguridad de los establecimientos de la zona podrían arrojar más luz sobre lo sucedido.
La rápida intervención de los presentes evitó una tragedia en una zona que, en otros momentos del día, cuenta con una mayor afluencia de personas, especialmente durante las horas de entrada y salida de los colegios cercanos. Aunque el incidente no dejó víctimas, los vecinos han descrito este acto de "kamikaze al volante".
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