“Luz y color” de la Legión a un Pendón novedoso y flojo de gente

Mucha novedad en el acto de la celebración de los 535 años de la toma de la ciudad por parte de los Reyes Católicos realizado este jueves, aunque estos cambios, de momento, no han supuesto un incremento de público en un evento que no termina de congregar a la gente y menos cuando este año no estaba declarado el 26 de diciembre como festivo local. 

Todo comenzó a las 8.00 horas al colocar el Pendón en el balcón de la Plaza de la Administración Vieja, lugar que se estrenó como sede de estos actos a causa de las obras que se están desarrollando en la Plaza Vieja en la actualidad y que impedían que el Pendón ondeara desde el balcón central. Quizá esta complicación ha permitido descubrir un posible emplazamiento para futuro ya que le sienta bien a esta celebración un lugar algo más pequeño y en plena calle.

Curioso que desde que el Ayuntamiento volviera a la Plaza Vieja el acto ya haya recorrido los tres cuerpos principales de las casas consistoriales según han ido evolucionando las obras de rehabilitación.

Más allá del lugar, las novedades ya comenzaron en el momento en el que la Policía Local de Almería realizaba las salvas de fusilería para anunciar que ya estaba expuesto el Pendón. Unas salvas que son “menos molestas para las personas con determinadas discapacidades y para los animales” que las que se realizaban antes, según explicaba la alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez. 

Defiende el cambio la regidora y asegura que, como todos los cambios que se han realizado, buscan mantener la tradición pero adaptándola a la actualidad.

Volviendo al acto, sorprendía a todos (e incluso levantó aplausos, algo que pasó en varios momentos de la celebración) la participación de la Sección de Honores y Banda de Guerra de la Legión. Contaban los más veteranos de la celebración que hace unos 30 años que el ejército no había participado y sin lugar a dudas fueron los que más interés despertaron. 

Repetir
Decía la alcaldesa después del acto que habían dado “luz y color” los miembros de la Legión al desfile y mostró su intención de que vengan cada año y tratar de que cada año haya mayor número de participantes. Una participación que la alcaldesa quiere que sea algo habitual en esta conmemoración. Sin duda fueron los que más atención tuvieron a lo largo de todo el recorrido.

El acto en sí comenzó cuando tras jurar tres veces que lo devolvería en perfectas condiciones, el concejal más joven de la Corporación (sin contar a Alejandro Lorenzo), Óscar Bleda, recogía el Pendón para iniciar el camino acompañado por una comitiva casi superior al público en la que estaba el Corporación Municipal (con algunas ausencias), la delegada de Gobierno, Aránzazu Martín, el subdelegado de Gobierno, José María Martín, parlamentarios andaluces, nacionales, representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y el presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías, José Rafael Soto.

Las calles nuevas del itinerario fueron bien recibidas, aunque otra de las sorpresas de la jornada fue la ausencia del obispo de Almería, Antonio Gómez Cantero, que no ofició la misa en honor al protomártir San Esteban, haciéndolo en su lugar y presidiendo también la presencia del Cabildo Catedralicio en el desfile, el dean de la Catedral, don Juan José Martín Campos. Misa en la que la alcaldesa y el edil de Sostenibilidad fueron los encargados de hacer las lecturas. No se recuerda otra ocasión en que fueran los políticos los que tomaran la palabra en esta celebración.

El recorrido del Pendón por las calles de Almería acompañado por el Cabildo fue casi el tradicional, salvo el paso por la Plaza Careaga, de ahí a la Plaza de la Catedral y de nuevo al Ayuntamiento. La tremolación la realizaba la alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez, entorno a las 12.30 horas en el balcón lateral de la Casa Consistorial. Tras esto, y los himnos correspondientes, se quedó el Pendón colgado en el balcón hasta que anocheció.