La Policía Nacional evita el asalto de una banda a siete joyerías

Conocido en el argot policial como el "pescao", el chico ocupaba un rol básico para la banda. Era el encargado del análisis de los objetivos y ponía su ojo clínico al servicio de la organización. El "pescao" examinaba los establecimientos antes de los atracos, detectaba los puntos débiles del local y ofrecía la información necesaria para los asaltos. Su arresto es parte directa del éxito de la denominada Operación Ruta 69, desarrollada por la Policía Nacional de Almería.

El Grupo V de la Policía Judicial ha detenido a 11 jóvenes presuntamente implicados en 14 robos en los dos últimos meses, fundamentalmente en la capital. Entre sus víctimas están una estación de servicio de la compañía CEPSA, un estanco en la calle América y una joyería de la calle Terriza, todos ellos perpetrados a punta de pistola.

Doble éxito

Mandos de la Comisaría de Almería interpretan la operación como un gran golpe a la delincuencia organizada en la provincia por el número de detenidos, el ingreso en prisión de los cabecillas (seis personas) y la recuperación de 150.000 euros en joyas.

Ahora bien, Ruta 69 es también un enorme esfuerzo de prevención. Según fuentes de la investigación, el Grupo V de la Policía Judicial y la Brigada de Seguridad Ciudadana consiguen con esta intervención frustrar un puñado de atracos a mano armada preparados en la capital.

Gracias a la labor de espionaje del "pescao", la banda criminal planificaba el robo en siete joyerías de la ciudad sin cámaras de videovigilancia o con escasas medidas de seguridad. Los atracos eran inminentes y la irrupción de la Policía Nacional fue fundamental para evitarlos.

Según fuentes de la investigación, el grupo desarticulado había decidido atacar el pasado viernes una joyería ubicada en la Avenida Cabo de Gata de la capital, entre el Zapillo y la playa. El "pescao" identificó las “posibilidades” del golpe y los jóvenes delincuentes habían puesto fecha y hora para el robo.

Sin embargo, la Policía Judicial frustró los planes. Una operación coordinada por el jefe del Grupo V, Marcos Castro, terminó con la captura de 11 personas en la barriada de El Puche y la calle Granada. En los cinco registros domiciliarios efectuados se intervinieron tres armas de fuego, abundante munición, unas 150 piezas de joyería, prendas de vestir y herramientas empleadas en los robos, aparatos informáticos, 1.500 euros en metálico y otros efectos que los relacionan con los hechos delictivos.  Las diligencias corresponden al Juzgado de Instrucción número Dos de Almería.

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