El agresor "caníbal" ingresa en El Acebuche bajo estrecha vigilancia

Héctor B. S., de 28 años de edad y natural de Barcelona, descansa en una celda del centro penitenciario de Almería. La juez titular del Juzgado de Instrucción número Cinco de Almería decretó ayer el ingreso en El Acebuche del autor confeso de un ‘ataque caníbal’ en un parque de la Avenida del Mediterráneo, la noche del pasado lunes.

El joven está acusado de un delito de lesiones graves a un vecino de 45 años asaltado a las 22 horas del pasado lunes. La víctima recibió mordiscos en ambas manos (con afectación grave en los dedos), el gemelo, la cabeza, una ceja y un hombro, y perdió la oreja derecha de una dentellada, según las diligencias policiales.

Dos patrullas de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional arrestaron a Héctor B. S. en el mismo lugar del suceso, manchado de sangre y con severas heridas en el rostro, especialmente en la boca. Los agentes, no sin dificultades, consiguieron reducirlo, meterlo en un coche policial y trasladarlo hasta el hospital Virgen del Mar para recibir asistencia médica. Sin embargo, el joven intentó morder a los facultativos y acabó finalmente ingresado en el departamento de Salud Mental del complejo hospitalario de Torrecárdenas, sedado.

Juzgado

El miércoles la Policía Nacional procedió a su puesta a disposición judicial. Los agentes tomaron las precauciones correspondientes para evitar posibles agresiones y trasladaron al detenido hasta la Ciudad de la Justicia de Almería. Las diligencias corresponden al Juzgado de Instrucción número Cinco, en funciones de guardia. La juez decretó prisión provisional y Héctor B. S. ingresó en El Acebuche la tarde del miércoles. Ahora se encuentra bajo un estrecho seguimiento, médico y de seguridad.

Según los informes, se trata de un indigente que dormía con frecuencia en el centro de acogida municipal, muy cerca del lugar donde se produjo la agresión.

Además, su estado físico está muy deteriorado y se encuentra dañado por los golpes recibidos durante el ataque perpetrado contra un viandante, cuando la víctima intentaba quitarse de encima a duras penas al "mordedor". Según manifestó el detenido cuando era reducido por los agentes, su intención era acabar con la vida de la víctima, sólo por mirarle mal. “No lo he matado porque ha salido corriendo”, confesó a los policías.

Estudio

El personal técnico de El Acebuche trata ahora a Héctor B. S. con especial atención, teniendo en cuenta los antecedentes de violencia y su estado físico y mental. Según los informes médicos incluidos en las diligencias judiciales, el detenido había consumido grandes cantidades de alcohol y hachís. Así pues, será incluido en un programa de desintoxicación durante su estancia en la prisión de Almería y se evalúa si hacerlo también en el plan de prevención de suicidios.

Mientras, la víctima se recupera poco a poco de las lesiones sufridas la noche del lunes. El hombre se presentó por su propio pie en la Comisaría Provincial de Almería, cubierto de sangre y  entre gritos de auxilio. Tras recibir asistencia de urgencia en las propias dependencias policiales fue trasladado al hospital y desde allí hasta un centro sanitario de Granada, donde se sometió a cirugía reparadora en la oreja (un agente de la Policía Nacional encontró un trozo de la oreja en el suelo del parque).

Según los testigos, la agresión se produjo casi sin mediar palabra y con extrema violencia. La hu