La media Maratón a paso saludable

8 de febrero, diez de la mañana. Empieza la XVIII Media Maratón de la Ciudad de Almería. Se espera la inscripción de cientos de corredores para una prueba de más de 21 kilómetros “no apta para quienes no se han preparado antes”. Convertirla en una cita saludable depende de que cada corredor sea consciente de sus capacidades y conozca la respuesta de su organismo. 

Así lo ven los profesionales de la salud que, desde consultas de Medicina Deportiva, pero también desde Atención Primaria, confirman que no se puede uno enfrentar a esta prueba sin haber entrenado entre 3 y 4 meses. Sobre todo, si se superan los 40 años.

Conviene, en estos casos, acudir a un médico deportivo para un chequeo que incluya un electrocardiograma y una prueba de esfuerzo, explica el especialista en Medicina de Familia y Máster en Medicina de Urgencias y Emergencias, Francisco Llave Gamero.

Revisión imprescindible La revisión médica se convierte en imprescindible para pacientes crónicos con hipertensión, para fumadores, a los que Llave aconseja una espirometría para conocer la capacidad respiratoria, y para diabéticos, independientemente de la edad.

Pacientes con problemas articulares o personas con sobrepeso o incluso obesidad han de pasar primero una revisión  para evitar agravamiento de síntomas o nuevas patologías asociadas.

Un entrenamiento continuado y previo a una carrera de más de 21 kilómetros sirve para que el corredor se autoevalúe, observe deficiencias y pueda, por tanto, evitar un esfuerzo que le acarree problemas de salud.

Y es que la opción de 9 kilómetros de carrera saludable que propone el área municipal de Deportes del Ayuntamiento de Almería es una posibilidad “estupenda” para quienes no hayan adquirido la preparación física necesaria para la media maratón. El resto, los corredores habituales y entrenados han de observar, no obstante, algunas recomendaciones como las de utilizar ropa cómoda, holgada y que transpire.

Cuidar la piel durante actividades de media-larga duración es básico y fácil con el uso de protectores solares y gorras. El calzado ha de ser cómodo y usado previamente, aconseja Llave, que insiste en la importancia de realizar un calentamiento previo por las inmediaciones de la salida.

Conviene iniciar la carrera con un ritmo suave, incluso inferior al habitual y “dejarse guiar” por las señales físicas objetivas (frecuencia cardíaca, respiratoria, nivel de dificultad para respirar y fatiga muscular), además de por las “sensaciones” percibidas.

Señales de alarma “Deje de correr y consulte con el servicio médico ante vómitos, debilidad general, sudoración mayor de la habitual, desorientación, vértigo, confusión, visión borrosa, dolor en el pecho y dificultad para respirar”, alerta, a la par que  aconseja no parar bruscamente al llegar a la meta.