Los 12.000 kilómetros de la cocaína

El poderoso Cártel de Cali organizó el alijo de cocaína   decomisado el pasado 7 de febrero en un polígono industrial de Cartagena (Murcia). Una investigación de dos años permite a la Policía Nacional reconstruir paso a paso un viaje de 12.000 kilómetros y conectar a los productores de la droga con traficantes asentados en Almería, Murcia y Madrid.

La intervención coordinada por un juzgado de Torrevieja (Alicante) se salda con la aprehensión de un alijo de 510 kilos de cocaína, con un valor de más de 15 millones de euros en el mercado clandestino, y con el arresto de once personas. Entre los detenidos se encuentran tres vecinos de Olula del Río reseñados como José Antonio G. G. alias Gari, Juan José C. C. y José Antonio C. C., así como cuatro ciudadanos colombianos domiciliados en Madrid.

La droga partió de Cali el pasado 12 de diciembre en un camión. Estaba oculta en láminas cubiertas de plástico y cinta adhesiva y colocadas entre pieles de buey. El cártel colocó 91 pieles de bovino en once palés y los guardó en un contenedor metálico.
La mercancía llegó por carretera a Buenaventura, una ciudad industrial a unos 100 kilómetros de Cali, en la costa del Pacífico. Allí se cargó en un buque junto a miles de contenedores y tomó rumbo al Pacífico. Cruzó el Canal de Panamá y alcanzó el puerto de Cartagena de Indias (Colombia) el 6 de enero.

Cuatro días más tarde los operarios subieron el contenedor en el buque Paita con destino a Valencia. El mercante tocó el puerto español el 25 de enero. La Policía Nacional tenía controlado ya el contenedor, gracias a las intensas investigaciones de la UDYCO (Crimen Organizado).
La organización preparó un gran despliegue logístico y dejó unos días de margen de seguridad. El 6 de febrero, tras pasar por los controles aduaneros, un camión cargó el contenedor y tomó la carretera a Cartagena. La mercancía llegó a las 14 horas a la nave industrial de la calle Riga, del polígono Cabezo Beaza.

El 7 de febrero, a las 9 horas, el Grupo Especial de Operaciones (GEO) tomó la nave, mientras la UDYCO arrestaba a tres personas en Olula del Río (Almería), entre ellas Gari, absuelto de dos delitos de homicidio tras matar a tiros a dos miembros del clan de los Pertolos en la nave de su empresa en 2009.