Almería rebasa por primera vez la cifra de medio millón de cerdos

Javier Fernández Bermúdez es un joven albojense que quiere ser ganadero, quiere vivir de engordar 2.500 cabezas de porcino, a través de una empresa que le suministra todo lo necesario en el paraje de Los Pilares de Albox, cerca del núcleo rural de Los Marcelinos.

El proyecto de esta explotación porcina intensiva, con cuatro naves industriales y balsa depuradora de purines, está a la espera de obtener los  permisos ambientales necesarios por parte del Ayuntamiento y la Junta de Andalucía. Es un ejemplo de la reactivación que se está produciendo en este sector agropecuario en el que Almería está a la cabeza de la Comunidad junto a Sevilla. Tras una ralentización de tres años, la apertura y modernización de cebaderos de cerdo blanco está repicando con fuerza en las principales comarcas ganaderas de la provincia.

Así lo confirma, Antonio Mena, técnico de la Oficina Comarcal Agraria del Alto Almanzora, quien explica que “hay casos de empresarios del sector del mármol que están invirtiendo en granjas de engorde porque lo ven un negocio rentable”.
Mena calcula que en el plazo de unos meses, la cabaña porcina almeriense se incrementará en más de 20.000 cabezas, solo en la comarca del Almanzora, superando el medio millón de cabezas.

Los proyectos más ambicioso se ha presentado en Taberno con una  nueva explotación de 6.000 cabezas de ganado y en Somontín con una ampliación hasta 7.200 ejemplares. También hay instalaciones en ciernes en Macael, en Tíjola, Urrácal y en otras zonas rurales ubicadas en varios de los 26 municipios que dependen de la Oficina Comarcal del Alto Almanzora.

Exigencias ambientales A pesar de que la tramitación de proyectos es muy laboriosa, reconoce Mena, por las exigencias ambientales que deben de cumplir estas explotaciones ganaderas, hay empresarios no profesionales que están decidiendo invertir en este sector económico arrendándolo a encargados de mantener la explotación.
Tiene también como reclamo este sector la posibilidad de obtener ayudas europeas incluidas en los planes de desarrollo rural. La provincia de Almería sumaba al cierre del pasado año con 490.754 cabezas de porcino blanco, la segunda cabaña de Andalucía tras Sevilla (576.208). Supone ello que casi una cuarta parte de todos los ejemplares andaluces -2,2 millones- se ceban en granjas almerienses.

La mayor parte de los cerdos almerienses, una vez engordados se sacrifican para carne en fresco en mataderos de Murcia y Cataluña y para derivados cárnicos.