No es difícil, por mucho que bajen las cifras, pararse a mirar y ver cómo todavía hay muchos conductores que no usan el cinturón de seguridad o siguen hablando por el móvil. Tráfico quiere poner fin a esto de una forma bastante sencilla y tecnológica, y es que en las próximas semanas colocará hasta 70 cámaras capaces de detectar y multar a los infractores que no respeten una de estas dos normas.
Su funcionamiento, según nos cuenta la DGT, es muy sencillo. También lo es su instalación. Son simplemente cámaras capaces de tomar hasta 50 imágenes por segundo, captando lógicamente el frontal del coche, dejando al descubierto al conductor. Constan de un sistema de reconocimiento de imágenes que juzga si el conductor va sin cinturón o hablando por el móvil.
Para comprobar que es correcto, la DGT comprobará que las imágenes que muestren la infracción son reales y certeras. No es la primera vez que a alguien le multan por rascarse la oreja. Habrá que ver qué fiabilidad tiene este sistema, pero el hecho de que Tráfico haya dispuesto de hasta 70 unidades, da por hecho que se trata de un útil con un elevado nivel de efectividad.
La DGT ha anunciado que será una primera ofensiva de lo que llegará a lo largo de 2016. Mientras que estas cámaras de vigilancia de infracciones completarán 70 localizaciones, está planeado colocar 6 nuevos radares de tramos. Ambos se instalarán principalmente en vías secundarias.
Este nuevo sistema de cámaras completa la labor no sólo de los agentes de tráfico que controlan las carreteras, sino también la vigilancia de los helicópteros de la DGT, que también son capaces de detectar al conductor sin cinturón de seguridad o hablando por el móvil desde las alturas. Lo que no sabemos, al no ser estos nuevos dispositivos unos radares, si habrá señalización que avise de su presencia.
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