El VAR del Festival (III): Más vale solo que mal asesorado

En esta edición del Festival Internacional de Cine de Almería hay muchos estrenos, y no precisamente cinematográficos. 

No en vano, si bien la llegada de FICAL suele suponer año tras año el reencuentro con muchos rostros familiares que pululan alrededor del mundo almeriense del celuloide, este año hay notables novedades, especialmente en el plano político.

Sorprende a los que no la conocíamos la flamante diputada provincial de Cultura y Cine, la también alcaldesa de Laujar, Almudena Morales. Y sorprende para bien, por lo que va para candidata a mejor actriz revelación de este FICAL.

Y es que la diputada se implica en cada acto, en cada rueda de prensa, en cada mesa redonda... Y quizás debería ser lo normal, pero lo cierto es que no es a lo que estamos acostumbrados. Morales presenta, pregunta, comenta... Desde estas líneas le celebramos que no sea una figurante más en los actos de FICAL, sino que quiera tener también su pequeño papel.

La adaptación 

No obstante, no todos los nuevos rostros de esta edición de FICAL llevan tan bien lo de adaptarse a su nuevo rol, sea el que sea.

Así, también hay personalidades descartadas para los premios desde el primer día. Sin ir más lejos, en la gala inaugural hubo un nuevo cargo político que se negó a hacer algo tan tradicional que forma ya parte del ADN del festival: mirar a cámara y hacer con la mano un gestito tipo ‘ven, ven’ que luego pasa a formar parte del vídeo promocional de cada año.

Que podrá ser más o menos original, más o menos atractivo. Pero tampoco es la cosa como para decir, en público y de forma notoria “ay, no, ese gesto no, que es muy feo”. Frase y gesto cazado por el VAR del Festival, claro.

Desde luego, no deja de ser algo anecdótico, pero sirve para subrayar lo importante que es la adaptación al medio y estar bien asesorado. Que, ya se sabe, a veces más vale solo que mal acompañado.