Apenas media hora de debate, 26 votos a favor de la moción y solo uno en contra (y con algo de bronca): así fue el debate sobre la moción presentada por Vox en el último pleno del Ayuntamiento de Almería y que ponía sobre la mesa atender las reivindicaciones de la Banda de Cornetas y Tambores Nuestra Señora del Carmen.
Esas reivindicaciones no son otras que acceso a luz y agua en los locales cedidos por el Ayuntamiento en los que la banda guarda sus instrumentos y enseres (y donde sufrieron un robo hace unos meses), además de más horas de acceso al Promontorio, local municipal en el que ensayan 4 horas a la semana con permiso de la Escuela Municipal de Folclore. Y todo ello, formalizado por medio de la firma de un convenio.
Cultura
A la moción presentada por Vox, el concejal del Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería, Diego Cruz, planteó que "en un principio a la banda se le ofrecieron otros espacios para ensayar y no los aceptaron", tal y como confirman fuentes de la banda: se les ofreció una zona cercana a la conocida como 'cueva de la Campsa' y, por considerarlo un entorno peligroso (en el que la propia banda sufrió ya un ataque en su día), declinaron la oferta.
Más allá de esta oferta inicial, Cruz aseguró que el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Almería "reafirma su compromiso para seguir trabajando para que el Carmen ensaye".
Todo ello, en un debate con pocos desencuentros. El concejal Pérez de la Blanca llegaba a asegurar que la moción daba lugar "a poco o nulo debate. Es una banda de referencia y ha pasado por numerosos sinsabores. Si existe algún tipo de compromiso con esta banda, lo lógico es formalizarlo como corresponde".
Por su parte, el concejal de Ciudadanos Miguel Cazorla recordaba, antes de anunciar su apoyo a la moción, que "esta banda hace algo que se llama arte. Estos chicos también hacen una labor social magnifica, quitando a otros chicos de otras muchas cosas. Estos músicos educan, dan clase de forma generosa y altruista a niños y chavales de todas las edades" y, además, señalaba la posible futura solución para todos los grupos de música y asociaciones que busquen un sitio: la futura Ciudad de la Cultura.
A continuación, el socialista Antonio Ruano señalaba que "merecen un espacio digno: con luz, con agua y sin regateos", no sin antes plantear que el Ayuntamiento de Almería debería "inventariar todos los inmuebles municipales vacíos, anunciarlos en el portal de transparencia y que los almerienses puedan solicitar su uso", creando también para ello un reglamento propio para la ocupación de estos espacios municipales.
Y hasta ahí los 20 apoyos a la moción de Vox, que se encontró con un escollo: un voto negativo de la concejal de Podemos, Carmen Mateos, que invitaba a la banda del Carmen a "acudir al Obispado ya que es una agrupación musical con carácter religioso y el Obispado tiene no pocos inmuebles por los que no paga ni IBI a este Ayuntamiento".
No obstante, tal y como señalaron el resto de grupos a la concejal Mateos, el Carmen no es una asociación religiosa, sino que se trata de una asociación civil que, más allá de su innegable relación con lo cofrade y la religión, es una muestra más de la cultura almeriense, en todo tipo de actos y certámenes.
Más allá del carácter religioso de la polémica, Carmen Mateos señalaba que "es un agravio comparativo para otras asociaciones y formaciones musicales del termino municipal de Almería que tienen que pagar sus propios locales de ensayo y sin embargo está pidiendo usted que se les de unos privilegios a unos en detrimento de otros. No es justo", sentenciaba.
Polémicas aparte, el apoyo a la Banda del Carmen rozó la unanimidad. Ahora solo falta ver si se confirma en el deseado convenio y su situación en los locales municipales mejora.
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