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Desde el año 2014, y de forma ininterrumpida, el día 15 de septiembre tenía un sonido especial en el monumento más icónico de la ciudad de Almería: es el único día del año en el que repica la campana del Muro de la Vela, bautizada como Nuestra Señora de los Dolores (festividad que se celebra ese día). Se trata de un privilegio otorgado desde la propia Alcazaba a la Hermandad de la Soledad, y que esta cede a personalidades de la ciudad de Almería.
Este año, la elegida no era otra que la recién nombrada alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez, "por tratarse del CCL aniversario fundacional de nuestra corporación y esa relación indisoluble de amor ininterrumpido entre la ciudad y nuestra Santísima Virgen". Sin embargo, el privilegio concedido a la alcaldesa tendrá que esperar, ya que este año no habrá repique de campanas desde la Alcazaba.
"Este año se nos ha comunicado por parte del Conjunto Monumental de la Alcazaba de Almería que, debido a los trabajo realizados en el Muro de la Vela y al no haber sido recepcionada la obra en estos momentos, no será posible tocar la Campana del Muro de la Vela, Nuestra Señora de los Dolores, coincidiendo con el rezo del Ángelus como es tradición en nuestra Hermandad en los últimos años", explican a través de un comunicado desde la junta de gobierno de la Hermandad de la Soledad.
El último elegido para hacer sonar la campana fue Francisco Escámez, párroco de Santiago y consiliario de la hermandad del Viernes Santo, que cumplió con este honor el 14 de septiembre de 2021. Ahora, las obras interrumpen la tradición cuando iba a cumplirse el noveno año consecutivo en el que la corporación con sede en la parroquia de Santiago hacía sonar esta campana, antaño símbolo de la ciudad.
Cabe recordar que en el año 2014, tras 50 años en desuso (y sin badajo, por motivos de seguridad), la Alcazaba quiso recuperar este elemento histórico y colaborar con la Hermandad de la Soledad para celebrar la festividad de la Virgen de los Dolores con este repique de campana desde el Muro de la Vela.
Nueve años después, y debido a las obras, el Muro de la Vela guardará silencio en el día de la Virgen de los Dolores, esperando la llegada de 2023.
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