El cauce del río Adra aparece cubierto de residuos plásticos de la agricultura

Una masa enorme de plásticos procedentes de la agricultura cubre el cauce del río Adra dejando a la vista un paisaje desolador y, lo peor, creando un verdadero peligro para ciudadanos y explotaciones agrarias en caso de que llueva. “En Adra o no llueva nada o cuando lo hace es en tromba y arrambla con todo”, recuerda María, una vecina de la zona que este domingo salió a dar un paseo y volvió con unas imágenes que hablan por sí solas. El tramo en el que las fotografías evidencian que los residuos plásticos prácticamente tapan la tierra se encuentra entre la A-7 y La Alquería, concretamente n la zona conocida como la Cuesta del Borrego.

La limpieza del río Adra se ha convertido en un conflicto entre administraciones que las mantiene enfrentadas desde hace años. 

Competencias

Por un lado, el Ayuntamiento exige a la Junta de Andalucía que cumpla con su obligación, ya que “la limpieza del cauce es su competencia”, asegura, Manuel Cortés, alcalde de Adra. De hecho, a finales del pasado año y después de que en septiembre las lluvias produjeran una crecida del río que acabó anegando más de 50 viviendas del pueblo, el asunto de la limpieza del cauce se trató en el Pleno municipal donde todos los grupos, excepto Plataforma Abderitana, apoyaron una manifestación ciudadana. Así, el 18 de octubre, unos 700 vecinos salían a la calle para reivindicar una actuación urgente en el cauce del río que evitara nuevas riadas.

Mientras, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio siempre ha defendido que “limpieza en cuanto a la recogida de los residuos sólidos urbanos arrojados a los cauces públicos en tramos municipales, así como lo plásticos agrícolas son estrictamente municipales”, de forma que a los gobiernos locales les corresponde también “la vigilancia, inspección y sanción en el ámbito de sus competencias”.

En este sentido, el alcalde de Adra asegura que técnicos municipales y personal del Ayuntamiento vigilan para evitar que se tire basura u otros residuos, “pero resulta muy difícil”, reconoce. 

Final de campaña

Además, Cortés recuerda que estamos al final de la campaña agrícola, momento en el que muchos invernaderos se deshacen de los plásticos, por lo que “son fechas muy complicadas”. El alcalde abderitano insiste en que intentan evitar que ocurra, pero también cree que “si el río estuviese limpio todo sería distinto, pero así, tan sucio, es más difícil impedir que se sigan arrojando residuos”.

Mucho temen que en la noche de San Juan acaben ardiendo una buena parte de los despojos que deja el final de la campaña agrícola y que algunos buscan una manera fácil de librarse de ellos.